La placa tectónica de la India está dejando de presionar sobre Asia

Himalaya
Foto: WIKIMEDIA COMMONS
Actualizado: miércoles, 29 febrero 2012 20:08

MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Hace cincuenta millones de años, la India chocó contra Eurasia en una colisión que dio origen a los terrenos más altos del planeta: el Himalaya y la meseta del Tíbet. India y Eurasia siguen convergiendo hoy en día, aunque a un ritmo cada vez más lento. La geomorfóloga y geofísica Marin Clark, de la Universidad de Michigan, se propuso averiguar si este movimiento iba a terminar, y sus causas; y ha llevado a cabo un estudio, publicado en 'Nature', que aporta resultados sorprendentes que disienten de la teoría bien establecida de las placas tectónicas.

   Clark, profesora asistente en el Departamento de Ciencias Terrestres y Ambientales, afirma que "el Himalaya y el Tíbet son las montañas más altas hoy en la Tierra, y pensamos que, probablemente, también lo han sido durante los últimos 500 millones de años. Mi trabajo trata de averiguar qué está ralentizando, ahora, la placa de la India". La investigadora sugiere que la fuerza del manto subyacente, y no la altura de las montañas, es el factor fundamental que determinará el fin del movimiento continental.

El manto de la Tierra es la cáscara gruesa de roca que separa la corteza interior del núcleo central. Según la teoría de la tectónica de placas, la parte externa de la Tierra está dividida en varias placas grandes; los continentes cabalgan sobre estas placas, que se mueven y chocan ocasionalmente. Las placas tectónicas se mueven a la misma velocidad que crecen las uñas, y la intensa actividad geológica -volcanes, terremotos y montañas de construcción, por ejemplo- se produce en los límites de las placas.

La velocidad a la que el subcontinente indio se mueve hacia Eurasia, se está desacelerando de manera exponencial, según Clark -quien revisó las posiciones registradas del norte de la India en los últimos 67 millones de años, para evaluar las tasas de convergencia. Según la experta, la convergencia se detendrá -poniendo fin a uno de los periodos más largos de formación de montañas en la historia geológica reciente- en unos 20 millones de años.

Hasta ahora, la creencia convencional entre los geólogos ha sido que la desaceleración de la convergencia de los límites de placas montañosas se relaciona con los cambios en la altura de las montañas -al crecer montañas más altas, ejercieron una cantidad cada vez mayor de fuerza en el límite de la placa, lo cual retrasó la convergencia. Pero en su nuevo artículo, Clark propone que un modelo diferente, basado en la fuerza de la parte superior del manto, directamente debajo de las montañas, el que mejor explica los movimientos después de la colisión, de la placa de la India.

Por 'fuerza' Clark se refiere a la capacidad del manto superior para resistir la deformación, una propiedad llamada resistencia viscosa; y sugiere que el manto relativamente fuerte, directamente debajo del Tíbet y el Himalaya, actúa como un freno que ralentiza -y, finalmente, detiene- la convergencia de los dos continentes.

Sin embargo, la resistencia viscosa no cuenta toda la historia. Otros factores también pueden contribuir a la ralentización de la placa de la India. Según Clark, "las observaciones críticas sobre el terreno mostraron que el borde norte de la meseta tibetana no se ha movido desde la colisión de hace 50 millones de años. Por lo tanto, el ancho de la meseta del Tíbet se está reduciendo".

La investigadora concluye que "la fuerza de la capa superior está manteniendo la formación de montañas constante; pero, a medida que ésta se reduce, el movimiento de las placas debe disminuir la velocidad para mantener esta tasa de disminución".