AMPL.- PE, "manipulado" por los peticionarios de la visita al no poder acceder con ellos a balsas de fosfoyesos

Actualizado: miércoles, 17 febrero 2010 21:54

Meyer hará constar en el informe final esta negación porque da la impresión de que "se quiere ocultar algo"

HUELVA, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

La eurodiputada Pascale Gruny, del Grupo del Partido Popular Europeo - Francia, presidenta de la comisión de Peticiones del Parlamento Europeo (PE), que mañana finaliza su visita a Sevilla y Huelva para analizar las denuncias presentadas por Greenpeace España, la Asociación Mesa de la Ría, Plataforma Mesa de la Ria-IU y el Proyecto Inter/Sur sobre los altos niveles de contaminación industrial en Huelva y sus alrededores, afirmó hoy sentirse "manipulada" por los citados peticionarios, al no poder acceder con ellos a las balsas de fosfoyesos, vertidos por Fertiberia, porque éstos "no habían pedido la autorización".

En declaraciones a los periodistas, Pascale Gruny, aseguró que la zona a visitar era "una zona cerrada explícitamente, ya que había carteles que dejaban claro que no se podía acceder a la zona sin autorización previa". En este sentido, precisó que la visita a las balsas acompañados por los peticionarios "no ha podido realizarse", a pesar de que ayer la comisión aceptó este ofrecimiento, pero "siempre que fuera en lugares abiertos", motivo por el cual se han sentido "manipulados y esto no nos ha gustado".

En cuanto a las sensaciones de la visita realizada esta mañana a las balsas de fosfoyesos acompañados por representantes de la empresa, señaló que éstas ha respondido a las preguntas con "respuestas concretas", indicando además que los sindicatos, con los que también han mantenido una reunión, han manifestado "sus preocupaciones" por el cierre de la fábrica.

Gruny aseguró que la empresa está determinando qué tipo de trabajos se emplearán para "obtener la máxima seguridad en la zona", indicando además que la comisión piensa que "existen otros residuos en la zona que provienen de otras empresas", algo que preguntarán mañana a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Huelva, instituciones con las que se reúnen.

Respecto a la conservación de los puestos de trabajo y del medio ambiente, la presidenta aseguró que es "perfectamente conciliable", no obstante, aseguró que el PE "tiene que conformar su opinión con opiniones muy variopintas".

Por su parte, el eurodiputado Willy Meyer, del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea, lamentó que se haya denegado el acceso a las balsas acompañados por los peticionarios, indicando además que "da la impresión de que quiere ocultar algo y no ayuda", por lo que a la hora de emitir el informe hará constar "el incidente".

En esta línea, aseguró que la Audiencia Nacional ha fijado fecha de caducidad para los vertidos de las balsas en diciembre de este año y todo indica que "no va a haber más vertidos de residuos industriales". Según Meyer, ahora el debate se centra en "qué hacer con estas 750 hectáreas, que a juicio de la Dirección General de Costas lo que hay que hacer es un estudio sobre el grado de contaminación de esta balsas y a partir de ahí, actuar".

"MÁS POR ALARMA SOCIAL"

Por otro lado, Luis Yáñez del Grupo de Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas señaló que en la visita que realizó la CE en el mes de septiembre se concluía que las balsas "no presentaban riesgos para la salud y hasta ahora todos los informes realizados dicen que hay alarma excesiva", indicando además que la empresa cerrará las balsas "más por alarma social que por alarma para la salud humana".

En cuanto a la visita en sí de los europarlamentarios, Yáñez pidió a la "población andaluza y onubense que esté tranquila porque no hay motivos para crear un catastrofismo y una alarma", a lo que añadió que "se ha ido creando una bola de nieve y parece que estamos aquí como en el caso de Chernóbil, y no hay ningún estudio que demuestre que hay riesgos serios para la salud humana con estos residuos industriales".

Por último, la eurodiputada Margrete Auken del Grupo de los Verdes, Alianza Libre Europea afirmó que hoy se le ha denegado a los parlamentarios, acompañados por los peticionarios, "el acceso a un lugar público y esto no es una opción inteligente". Auken señaló que el objetivo de esta visita a las balsas era que alguien que no trabajase para la fábrica los acompañase, un experto o alguien independiente, porque "sino era una pérdida de tiempo".

Mañana esta comisión se reunirá con el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez (PP); la presidenta de la Diputación, Petronila Guerrero, y posteriormente con miembros de la Junta de Andalucía.