Hospital Juan Ramón Jiménez concluye la ampliación del servicio de Urgencias con una inversión de 2,9 millones

HUELVA 30 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva ha concluido las obras de remodelación integral del servicio de Urgencias, un proyecto que ha contado con una inversión de 2,9 millones de euros durante los dos últimos años y que ha supuesto la ampliación de más de 1.000 metros cuadrados y la reforma completa de la superficie antigua para mejorar y modernizar los espacios asistenciales y de atención a los ciudadanos.

La consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, visitó hoy las nuevas áreas de Observación-Camas, Observación-Sillones, área de control y consultas de especialidades, que entrarán en funcionamiento de forma progresiva a partir de mañana para estar operativas el día 5 de octubre.

Se trata de la última etapa en la ejecución de este proyecto en el que la Junta ha invertido 2,9 millones de euros, entre obra civil, equipamiento y mobiliario. Según la Junta, las nuevas instalaciones mejoran la confortabilidad para pacientes y profesionales y cuentan con mejor distribución funcional, que permite al servicio una mejor capacidad resolutiva, disponiendo de circuitos diferenciados y dimensionados en función de los recorridos de los pacientes según sus necesidades del tratamiento.

Así, la ampliación de la superficie construida del servicio, que pasa de 1.719 a 2.794 metros, se evidencia especialmente en algunas zonas como es el caso de las nuevas áreas de Observación, que duplican su espacio. De este modo, el área de Observación-Camas amplía su dotación de 12 a 18 camas, con una distribución más adecuada en torno a la zona de control y mayor superficie por cama, mejorando la intimidad del paciente.

La zona de Observación-Sillones tiene capacidad para 21 puestos e incorpora como novedad una consulta médica específica integrada en el área, evitando los desplazamientos de los pacientes hasta las consultas generales para ser reevaluados.

Por otra parte, el área de consultas se reordena en torno a una zona de control, más amplia que la actual, pasando de 12 a 18 consultas --cinco consultas generales, cinco de especialidades, cuatro de traumatología, una consulta filtro, una consulta en Observación-Sillones, una de emergencias y una de enfermería--. La sala de reanimación cardiopulmonar (RCP) también duplica su capacidad de resolución con la dotación de dos puestos, uno para adultos y otro pediátrico.

En cuanto a las salas de espera, además de ganar en superficie, pasan de tres a cinco, distribuidas de la siguiente forma: una sala de espera general, una de pediatría, una de familiares, y dos de nueva creación, disponiéndose de capacidad para dos consultas de clasificación de pacientes, según el estado de gravedad a su llegada, duplicando la dotación anterior.

Finalmente, el área pediátrica está dotada con dos consultas y una nueva sala de aerosolterapia con cuatro puestos, así como un área específica de Observación infantil con cinco camas y una zona de control. También se amplían otras áreas de apoyo a la asistencia dotadas con despachos, sala de reuniones, aula y secretaría, entre otros.

CONDENA LA AGRESIÓN

En declaraciones a los periodistas tras visitar las nuevas áreas, María Jesús Montero condenó la última agresión sufrida por un enfermero el pasado jueves por parte de un familiar de un paciente en el Hospital Juan Ramón Jiménez.

En este sentido, mostró su solidaridad con el agredido y condenó "los actos de agresividad y violencia que se producen en el conjunto de la sociedad pero, especialmente en este ámbito, ya que trabajan y velan por mejorar la salud de los ciudadanos".

La consejera hizo hincapié en las medidas puestas en marcha desde el año 2005 en el marco del Plan de Agresiones, aunque destacó que medidas como cámaras de seguridad, timbres antipánico, sistemas de aviso en caso de que se produzca la agresión o cursos de formación, "no serán suficientes si no somos capaces de trasladar a los ciudadanos de que los profesionales sanitarios trabajan para intentar preservar su salud y recuperarla, por lo tanto no hay ningún motivo que justifique el hecho que una persona descargue su agresividad sobre un profesional".

Por último, aseguró que "la mejor pedagogía es la permanente para poner en valor el buen trabajo que realizan estos profesionales".