HUELVA 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
El informe del sindicato onubense UGT 'Actividades de FTA-UGT en el marco de la Cooperación Andalucía-Algarve 2005' detectó entre las incidencias producidas en la campaña fresera de 2005 que "no se respeta lo pactado por convenios en cuanto a salarios, que debe ser de 32,45 euros al día, mientras que la media suele ser de 30, y todo ello sin computar los inmigrantes no regularizados, a quienes se les paga 15 euros diarios y, en algunos casos, sólo la manutención del día".
La memoria de 2005 de UGT detalla las situaciones producidas con respecto a los inmigrantes no legalizados, "que se suelen encontrar en peores condiciones sociales y laborales que los demás" y asegura que "no pueden beneficiarse de las ayudas que las distintas administraciones conceden al resto de inmigrantes en situación de legalidad, lo que les impide, además, denunciar las múltiples injusticias que sobre ellos se cometen".
Asimismo, el informe añade que "también se observan, como algo generalizado, incidencias derivadas de la precariedad laboral en el sector, así como otras derivadas de la falta de formación e información y del temor a la denuncia".
Además, explica que "tampoco se respetan las 39 horas semanales de trabajo que marca el convenio, y en algunas fincas, sobre todo en las más grandes, no se les concede su media hora de descanso, llegándose a convertir en apenas 20 minutos".
Por otra parte, el informe explica que "se han producido diversos problemas derivados de la falta de entendimiento entre el empleador y los trabajadores debido al desconocimiento de la lengua del otro, dando como resultado que los inmigrantes lleguen a desconocer los derechos y las obligaciones de sus contratos".
En cuanto a las viviendas proporcionadas por los trabajadores, "no se han detectado en general las anomalías encontradas en años anteriores, en cuanto a las condiciones materiales y exteriores de las mismas, si bien algunas de ellas no cumplían las condiciones de habitabilidad".
En este sentido, especifica que lo más llamativo es que "se sigue observando una gran masificación en cuanto al número de personas que se alojan en estas viviendas" y destaca que "se produce la aparición de asentamiento ilegales en zonas de Palos de la Frontera, Moguer o Lepe, en los que malvivían trabajadores no legalizados que acudieron a estas zonas atraídos por las declaraciones de las patronales freseras antes del comienzo de la campaña".
El sindicato concluye que "éstas y otras incidencias laborales han hecho que a veces desde UGT se haya tenido que intervenir ante situaciones de injusticia, gracias al diálogo y la actuación de las personas que han hecho el seguimiento de la campaña de la fresa", de los que detalla que "fueron más frecuentes en la zona del Condado que en la Costa, debido a la mayor extensión de fincas y del número de trabajadores".