Tioxide propone a su plantilla 82 bajas incentivadas con el 65% de sueldo y el comité baraja "del 90 al 95%"

Actualizado: jueves, 5 marzo 2009 19:55

HUELVA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El comité de empresa de Tioxide, empresa ubicada en el Polo Químico de Huelva, tras reunirse esta mañana con el vicepresidente de operaciones de la compañía, Scott Anderson, apuntó hoy que la empresa ha propuesto "82 bajas incentivadas con el 65 por ciento del sueldo", pero los trabajadores, que siguen sin aceptar los despidos, barajan "del 90 al 95".

Así lo explicó a Europa Press el secretario del comité de empresa, Pedro Castilleja, quien aseguró que la reunión ha tenido "puntos positivos y negativos", resaltando el acuerdo de "poner en marcha la planta completa el próximo lunes", algo que calificó como "un paso importante".

En este sentido, subrayó que Scott Anderson se mostró, durante el encuentro, "abierto y comprensivo", transmitiéndole al comité "la complicada situación de todo el grupo por la caída de la demanda de pigmentos".

Por otra parte, Castilleja destacó que si la dirección "arranca la planta y hace las actualizaciones precisas de aquí al próximo mes de junio, los trabajadores estarían dispuestos a negociar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de forma rotativa, pero tendrían que ver el número de afectados y sus condiciones".

Así las cosas, apuntó que la dirección de la empresa ya conoce su propuesta acerca de la congelación salarial durante 2009, pero sin aceptar los despidos, sino una reestructuración del personal que contemple una salida "no traumática y con bajas pactadas", entre otros puntos, por lo que la empresa ha convocado la próxima semana al comité para "dar una respuesta que se acerque a las pretensiones de éste", según indicó Castilleja.

En cuanto a la reunión que ha mantenido, a su vez, durante el día de hoy Scott Anderson con la Junta de Andalucía, Castilleja concluyó que "finalmente el comité no ha estado presente porque se trataba del primer contacto con la Administración para intercambiar impresiones, y el vicepresidente prefería hacerlo en privado".