SEVILLA 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha lamentado este martes los últimos asesinatos de mujeres en España y ha alertado de que durante las fiestas navideñas que se inician esta semana suelen "repuntar" los casos de violencia de género, por lo que ha aconsejado a las mujeres que se encuentren en esa situación que denuncien y busquen ayuda.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, Sánchez Rubio ha indicado que tanto en estas fechas como en el periodo de vacaciones estivales se suele dar un "repunte" de los casos de violencia de género, por los que las mujeres afectadas por esta situación deben estar especialmente en alerta.
Para la consejera, cinco mujeres asesinadas en cuatro días es una cifra absolutamente intolerable para una sociedad.
Al mismo tiempo, ha puesto de manifiesto que las mujeres víctimas de la violencia se están sensibilizando, porque se ha producido un incremento en el número de denuncias, algo que es muy importante, pero "en todo caso hay que pedir ayuda".
Según se conoció ayer, las denuncias por violencia de género ascendieron a 7.994 en el tercer trimestre del año, un 9,17 por ciento más que en el mismo periodo del año 2015 y un 5,1 por ciento más si se compara con el segundo trimestre de este año, según recoge el balance del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial.
Andalucía está entre las comunidades con mayor tasa de denuncias por cada 10.000 mujeres, con 17,18 casos, dos puntos por encima de la media, en 15,23.
Además, en la región se incoaron 1.161 solicitudes de órdenes de protección, de las cuales 839, el 72 por ciento, se resolvieron de forma positiva y la protección fue adoptada; otras 313, el 27 por ciento, fueron denegadas y el uno por ciento, 9, no se admitieron.
En las 7.994 denuncias presentadas había 7.437 mujeres víctimas y, además, 748, el 10,1 por ciento de las que en Andalucía iniciaron un procedimiento judicial por violencia de género se acabaron acogiendo a su derecho a no declarar contra el agresor, es decir, renunciaron a seguir adelante.