SEVILLA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El economista jefe de España y Europa de BBVA Research, Rafael Doménech, ha señalado este martes que en la Comunidad andaluza, "al igual que en España", habrá que esperar a "mediados 2011" para ver tasas de crecimiento que sean "suficientemente intensas" como para "generar empleo en la magnitud suficiente como para que se note en una caída de la tasa de desempleo".
En declaraciones a los periodistas tras presentar el informe 'Situación Andalucía', Doménech ha indicado que hemos tocado "máximos" pero "vamos a estar oscilando durante unos trimestres por el carácter estacional del empleo".
Según ha apuntado, la economía andaluza presenta características "muy similares a España", si bien resaltando las diferencias, la más importante es una tasa de desempleo que está muy por encima de la media nacional. Asimismo, los niveles de endeudamiento del sector privado han sido mayores y el peso de la construcción.
También ha señalado como reto importante, la necesidad de mejorar el nivel de capital humano, "de la sociedad andaluza en general y de los jóvenes en particular", así como la creación de un entorno productivo donde las empresas puedan crecer y contratar, sobre todo, en sectores con bajos niveles de endeudamiento y que hacia la demanda exterior.
Por último, destaca que el comercio andaluz se concentra todavía especialmente en España y la Unión Europea (UE), aunque el resto del mundo gana fuerza y además se concentra en estrechos rangos de productos tanto para las exportaciones como para las importaciones. De ahí la importancia de diversificar la economía productiva sobre todo en actividades orientadas al sector exterior.
Además, detalla que los resultados para Andalucía del informe PISA permiten "un cierto optimismo", ya que el rendimiento de los estudiantes andaluces prácticamente ha convergido con el del resto de España, cuando se excluyen los estudiantes que pretenden abandonar la carrera académica.
ESPAÑA
A nivel nacional, Doménech indica que "dentro de lo malo" hay "buenas noticias", ya que "los datos del tercer trimestre que se conocen "más bien alimentan la sensación de que no se va a producir una caída significativa".
Según explica, las tensiones financieras observadas durante el segundo trimestre de 2010 están empezando a relajarse y los mercados de capitales se están volviendo a abrir parcialmente para los países periféricos de Europa.
De esta manera, en el segundo trimestre de 2010, la economía española registró un crecimiento ligeramente por encima del observado en el primer trimestre de 2010, apoyado en una demanda interna más dinámica de lo previsto.
El adelantamiento del gasto ante la subida del IVA y la finalización de los estímulos fiscales incentivaron el crecimiento de la demanda interna en el primer semestre de 2010, lo que sugeriría una posible recaída de la actividad en el segundo semestre de 2010 que, de momento, "no se está produciendo".
"NO DETERIORO DEL PIB"
El economista jefe de España y Europa de BBVA Research ha destacado que cuando ya ha transcurrido la mayor parte del tercer trimestre, "no se observan indicios de un deterioro significativo del PIB, aunque algunos indicadores sugieren que el consumo y la inversión se han resentido ligeramente por el cambio impositivo".
Pero la magnitud del ajuste, según señaló, "no ha sido suficiente como para tener efectos sobre el empleo, cuya evolución está siendo similar a la del trimestre anterior".
Este comportamiento del empleo, junto con los datos de confianza, tanto de los consumidores como de las empresas, mejores de lo esperado, permiten "aumentar ligeramente la previsión de crecimiento para el tercer trimestre de 2010". Si bien, la recuperación de la economía española continúa siendo "débil y la actividad se encuentra prácticamente estancada, la probabilidad de observar crecimientos negativos durante lo que queda del año ha disminuido".
REFORMAS, "AVANCES"
Doménect apunta que las reformas constituyen avances en la dirección correcta. Sin embargo, los retos a los que se enfrenta la economía española son lo "suficientemente exigentes como para que se sea muy ambicioso con la implementación de estas reformas".
"Se han sentado las bases para una consolidación fiscal ambiciosa y factible si el ajuste fiscal se lleva a cabo de forma rigurosa por todas las administraciones públicas", ha subrayado. En este sentido, apunta que se debería priorizar la racionalización del gasto corriente antes que continuar ajustando la inversión o la educación, evitar un aumento de la ya elevada progresividad fiscal y avanzar hacia un sistema impositivo más eficiente, simple y competitivo.
En cuanto a la reforma de la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorros (Lorca), el informe de BBVA la considera "positiva" por la profundización del proceso de reestructuración iniciado con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), por el amplio consenso político y la rapidez en el acuerdo y por la propia recuperación de la confianza sobre el conjunto del sector financiero español.
Asimismo, resalta que la reforma laboral supone "un paso en la dirección correcta con dudas sobre su efectividad". Si bien, indica que hay otras reformas que son "necesarias" como mejorar el crecimiento potencial del PIB, la mejora de la financiación de los servicios públicos, el aumento de la eficiencia del sistema impositivo y el aumento de precios para reflejar los niveles del mercado, exploración de la energía nuclear y la sostenibilidad del sistema de pensiones.
