Comercio de Luis Montoto critica la "ruina" de estar en "jaulas" y que en tramos no se vean operarios en un mes

El sector de comerciantes de la avenida Luis Montoto de Sevilla criticó hoy la "ruina" que para los profesionales está suponiendo el verse "encerrados en jaulas", en alusión al vallado instalado con motivo de las obras del carril bici y de la instauración del sentido único hasta la confluencia con Luis de Morales, lo que además se suma a la "impotencia" de ver como en algunos tramos "no se ve un operario desde hace un mes".

El presidente de la asociación de comerciantes de Luis Montoto, Agustín Rodríguez, señaló a Europa Press que el gremio podría verse "aliviado" si viera que las obras cuentan con trabajadores a pleno rendimiento. No obstante, "hay zonas, como por ejemplo desde Abengoa hasta la calle Jiménez Aranda, donde no se ve un operario desde hace mas de 33 días, y eso desespera mucho".

Por ello, el comercio denuncia públicamente la "lentitud" y el retraso de unas obras que, en el caso de la habilitación del sentido único, cuenta con un plazo que se alargaría, en principio, hasta los primeros días del año 2010, "porque van con retraso y tuvieron que pedir una prórroga".

"Los comercios tienen vallas y no para nadie, hay tiendas que facturas hasta un 60 por ciento menos y no hay quien pueda aguantar la dejadez de los que realizan las obras", subrayó Rodríguez, que asimismo criticó el 'modus operandi' de las obras, aludiendo a que desde el lunes 26 de octubre se ven cuadrillas de personas muy jóvenes barriendo las aceras y la obra, "y justo a su lado las máquinas levantando aceras y polvo, por lo que hacen un trabajo en balde".

Además, criticó que el carril bici también ha tapado los husillos antiguos y no hay nuevos colocados "ni en la calzada ni en la acera", por lo que el presidente de los comerciantes de Luis Montoto se preguntó "qué van a hacer con las aguas cuando llueva".

Desde el inicio de los trabajos han cerrado casi una veintena de negocios perjudicados por estas obras; la valla que delimita la actuación ha desplazado más de diez metros de las puertas de los locales el paso para los peatones. "Los usuarios, vecinos, trabajadores y clientes se ven obligados a atravesar hasta mas de 100 metros por pleno tajo, con el consiguiente peligro e incomodidad para todos los que allí desarrollan su actividad", lamentan los profesionales.