SEVILLA 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
El edificio de la comunidad de propietarios del número 30 de la calle Arquitecto José Gómez Millán, en la barriada de Las Naciones de Sevilla, donde la madrugada del pasado 17 de julio un sujeto de 67 años intentó hacer volar el edificio con siete bombonas de gas butano y líquido inflamable, entre otros artilugios, ha recuperado las condiciones de habitabilidad a raíz de la reparación de un ascensor, único requisito que restaba para ello, por lo que el inmueble estará repoblado en su totalidad en torno al mes de noviembre.
El administrador de fincas que gestiona la comunidad de propietarios de este edificio y vecino del propio bloque, José Enrique Algaba, indicó a Europa Press que, aunque aún queda la habilitación del otro elevador, la puesta a efecto de uno "hace que el edificio ya pueda recuperar la normalidad", permitiendo el acceso a las personas mayores que viven en los pisos altos y que hasta ahora no podían llegar con facilidad a sus domicilios.
De hecho, Algaba subrayó que el inmueble se va llenando "poco a poco" y que, actualmente, ya se encuentra a un 40 por ciento de su ocupación total, después de que varias familias abrieran el camino retornando a sus hogares el pasado mes de agosto, a pesar de no cumplirse las condiciones legales de habitabilidad necesarias.
El pasado 14 de septiembre, el acusado, Rafael P.P. 'El Francés', acudió al juzgado imputado por un presunto delito de calumnias e injurias realizadas en los meses previos al incendio, aunque finalmente se negó a declarar alegando para ello que sufre una pérdida de audición del 80 por ciento.
El administrador ya resaltó que se inició un proceso de entrevistas personales con el conjunto de 82 propietarios con la finalidad de personarse en la causa individualmente, después de que la comunidad de vecinos consumase su personación en la causa.
Algaba afirmó que el objetivo por el cual se están llevando a cabo estas entrevistas a los vecinos del bloque siniestrado es la evaluación propia de cada piso, la cuantificación de los daños y las lesiones de la estructura de los pisos, además de una concentración para reclamar los estropicios pertinentes.