SEVILLA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Provincial del Comercio y Servicios de Sevilla (Aprocom) y la Asociación de Hosteleros de Sevilla han valorado "positivamente" el proyecto de ordenanzas fiscales para el Ayuntamiento de Sevilla en 2012, al entender que "cualquier rebaja e incentivo supone un apoyo a la nuevas empresas o a la extensión de las ya existentes" y podrían además "atraer" a empresariado de fuera de la ciudad.
En declaraciones a Europa Press, el vicepresidente de Aprocom, Tomás González, ha subrayado la necesidad de que se realice un "esfuerzo para que descienda el paro y aumente el empleo en la ciudad". "Todo lo que sea crear empleo, empresas o riqueza para la ciudad es algo positivo ante la situación de crisis económica existente", subraya.
Así, indica que la supresión de la tasa de apertura de establecimientos para los locales que no superen los 500 metros cuadrados o las bonificaciones en el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO) suponen un "incentivo importante" para el empresario que tiene intención de ampliar sus puntos de venta y "puede priorizar el instalarse aquí en vez de en otra ciudad por la repercusión menor de los impuestos".
En la misma línea, el vicepresidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, Antonio Palomino, ha valorado todas las iniciativas que supongan la creación de nuevos negocios, "a través de incentivos desde la administración o la ayuda con las tasas". Así, afirma que el apoyo en cuanto a supresión de tasas o con el ICIO suponen acciones en una "línea apropiada".
Palomino señala a Europa Press que, aunque es "difícil que alguien deje de montar un negocio por una bonificación, estas ayudas suponen un impulso en su actividad", algo que apuesta por unir a la reducción de plazos para la puesta en marcha de los negocios.
El proyecto de ordenanzas fiscales realizado por el Gobierno del Ayuntamiento de Sevilla para 2012 contempla una congelación del coeficiente del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), además de la eliminación de la tasa de apertura de establecimientos para los locales que no superen los 500 metros cuadrados. Tampoco tributará la transmisión de puestos en los mercados de abastos entre progenitores y vástagos siempre que se mantenga la actividad y el empleo.
En el caso del impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), las nuevas ordenanzas contemplan bonificaciones de entre el 20 y el 80 por ciento cuando las empresas justifiquen un crecimiento de más de cinco puestos de empleo fijos con beneficio en personas desempleadas de la ciudad. Por lo que se refiere al impuesto sobre actividades económicas (IAE), su bonificación del 50 por ciento por mantenimiento del crecimiento de plantilla reduce de tres a dos años el periodo medio de consideración.
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