El que fuera rector de la Universidad Centroamericana de El Salvador durante 13 años participa en Sevilla en el Foro 'Diálogos Loyola'
SEVILLA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El foro 'Diálogos Loyola', promovido por Loyola Leadership School, centro de postgrado de la futura Universidad Loyola Andalucía, con la colaboración de CaixaEmpresa de 'La Caixa', ha celebrado este jueves un nuevo encuentro que ha contado con la participación del sacerdote jesuita José María Tojeira, rector de la Universidad Centroamericana (UCA) de El Salvador durante trece años, hasta finales de 2010, quien ha subrayado que en el contexto centroamericano, marcado por la desigualdad y la exclusión de la mayoría, "la universidad tiene un papel fundamental, como puente de diálogo y lugar de reflexión, y porque de ella deben salir las ideas que generen modelos de Estado donde la igualdad y la libertad se respeten y apoyen con la misma radicalidad".
Durante la conferencia, celebrada en el Campus de Sevilla de Loyola Leadership School, Tojeira ha tratado de mostrar la realidad centroamericana, "agobiada por una historia construida secularmente desde el poder de muy pocos, con fuertes anhelos de liberación, inmersa en y golpeada por las crisis internacionales". Además, ha definido la región como la zona "con mayores problemas económicos y sociales en este momento en América Latina y con menores perspectivas de desarrollo, exceptuando los casos de Panamá y Costa Rica".
Según Tojeira, aun con diferencias entre países en algunos aspectos muy importantes, "la región tiene problemas comunes y tiende inevitablemente a una mayor interrelación, a pesar del exceso de nacionalismo propiciado por las élites tradicionales". En este sentido, cree que en una sociedad cada vez más inserta en lo global ha resurgido la idea de la unión centroamericana, importante porque "estos países, tan pequeños y tan débiles estructuralmente, no tienen solución de desarrollo por separado".
Para el jesuita, que fue presentado por el presidente de la Fundación Universidad Loyola Andalucía, el también jesuita Ildefonso Camacho, "la desigualdad es uno de los factores principales a la hora de analizar los conflictos sociales, y uno de los desafíos más importantes que hay que vencer en Centroamérica".
Así, el ex rector de la UCA de El Salvador manifestó que el problema básico de la región está en "el modelo de desarrollo desigual que fomenta la exclusión económica y social de las mayorías, y está enfocado al beneficio de la élite y al servicio de una globalización marcada por la concentración de capitales y la utilización descarada de la pobreza al servicio de los mismos".
NIVEL DE BACHILLERATO
Así, por ejemplo, ha indicado que "en Honduras, Guatemala y Nicaragua no llega al 30 por ciento la población que alcanza el nivel de bachillerato, cuando se considera que para vencer la pobreza al menos el 70 por ciento de la población debe tener este nivel".
Para José María Tojeira, esta situación de exclusión provoca "el desarraigo y la migración, ya que se trata de países que llegan a tener fuera de sus fronteras entre el cinco y el 20 por ciento de su población originario, así como debilidad institucional y democrática que favorece el autoritarismo, disminuye la conciencia de aversión a la desigualdad, cultura individualista del 'sálvese quien pueda' y violencia".
Del mismo modo, Tojeira cree "indispensable" poner en marcha programas sociales que opten por redes de protección social incluyentes, acometer una reforma fiscal que oriente el presupuesto al gasto social y a la mejora de la productividad y que incremente las aportaciones de quien más tiene; fortalecer las instituciones y orientarlas hacia la transparencia y la eficacia, promover una educación de calidad desde las etapas preescolares, un sistema social de salud único, y un sistema de pensiones incluyente y generalizado, así como poner en marcha programas de lucha contra la pobreza unidos a proyectos de inclusión, y alcanzar un compromiso de formación e información orientada hacia la participación ciudadana, creación de conciencia crítica. En definitiva, "Redescubrir otro tipo de Estado desde el compromiso social y el apoyo y diálogo con las fuerzas emergentes desde la conciencia popular".
