SANTANDER, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
La puesta en servicio de la línea ferroviaria de Alta Velocidad (AVE) Madrid-Valladolid, prevista para finales de año, permitirá reducir en una hora y treinta minutos el tiempo de viaje en tren entre la capital y Santander.
Así lo aseguró hoy el presidente de Renfe, José Salgueiro, quien avanzó que en la actualidad la operadora ultima la oferta comercial que prestará una vez que la línea entre en servicio.
Salgueiro afirmó que Castilla y León y las comunidades de la Cornisa Cantábrica (Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco) se verán "muy favorecidas" con la puesta en marcha de este nuevo AVE.
Según sus datos, estos servicios llegarán a una población potencial de diez millones de habitantes, lo que representa el 22,3% del total nacional.
También se beneficiarán del AVE a Valladolid las provincias de Palencia, León, Oviedo, Gijón, Santander, Burgos y Bilbao, gracias a la utilización por parte de Renfe de trenes con rodadura desplazable, que pueden circular en parte de su recorrido por la línea AVE y reducir así los actuales tiempos de viaje con Madrid.
SANTANDER-MADRID EN 4 HORAS
El presidente de Renfe explicó que Santander dispone actualmente de dos Talgos y un Estrella que realizan el trayecto a Madrid en 5,30 horas, y señaló que en el futuro, esta relación estará atendida por tres o cuatro trenes diarios en cada sentido que realizarán el viaje en cuatro horas.
En lo que se refiere a los servicios de Media Distancia, Renfe renovará, de forma "intensiva", el material de Media Distancia en toda España, incluido el que circula entre Cantabria y Castilla y León, de aquí al año 2010. Con esa sustitución por nuevo material, la edad media de los trenes de Media Distancia pasará a ser inferior a 6 años en 2010.
Para ello, la inversión anual será de 183 millones de euros durante los próximos cinco años, muy superior a los 15 millones de euros anuales que este servicio había recibido como inversión media en el período 1996-2004.
El presidente de Renfe presentó hoy en Santander el contrato programa de la operadora con el Estado, que le obliga a ser rentable en 2010, ejercicio que debe cerrar con un beneficio de 8,5 millones de euros. Este contrato programa contempla una inversión global de 5.772 millones de euros hasta 2010, de los cuales el 88%, 5.085 millones de euros, irán destinados a la renovación integral del parque de trenes y locomotoras.
