El Gobierno definirá antes de un año un plan para armonizar la estructura tarifaria entre ambos países
MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
España y Portugal han mantenido contactos preliminares en relación con la armonización de la regulación del sistema gasista en ambos países, con vistas a explorar la posibilidad de crear un mercado común equivalente al mercado hispano-luso eléctrico (Mibel).
En respuesta a una pregunta parlamentaria a la que tuvo acceso Europa Press, el Gobierno aclara que "se han producido únicamente contactos preliminares", de forma que las conversaciones han avanzado fundamentalmente en la coordinación para el desarrollo del mercado ibérico de la electricidad, que comenzó a operar el pasado mes de julio.
El Ejecutivo señala que en el campo del gas, el muy reciente comienzo de incorporación de las normas comunes sobre el mercado interior del gas en Europa en la legislación portuguesa y la creciente interrelación entre el gas y la electricidad, junto con la iniciativa de la Comisión Europea en el grupo de trabajo de los organismos reguladores europeos para impulsar el desarrollo de mercados regionales, "deberían impulsar una mayor armonización entre ambos países".
En concreto, el Gobierno entiende que esta armonización debería ser, fundamentalmente, la aproximación de la legislación portuguesa actualmente en trámite o en proyectos a la legislación española equivalente.
Respecto al mercado eléctrico, el Ejecutivo garantizará el acceso a las interconexiones para crear liquidez y se compromete a incrementar la capacidad de interconexión existente, mediante el desarrollo gradual de las instalaciones de interconexión.
El desarrollo de este mercado se irá realizando en diferentes etapas, de tal forma que para la etapa final se requeriría una integración mayor de los modelos eléctricos, siendo necesario avanzar en la armonización de los sistemas eléctricos entre países.
Según el Gobierno, este mercado de electricidad incluirá un conjunto de mercados organizados y no organizados, en los que ser realizarán transacciones o contratos de energía eléctrica y en los que se negociarán instrumentos financieros en igualdad de condiciones para todas las empresas eléctricas en el ámbito del Mibel.
El Gobierno también muestra su compromiso por armonizar las estructuras tarifarias de ambos países, para lo que, antes de transcurrido un año desde la entrada en funcionamiento del Mibel, se se definirá un plan para llevarlo a cabo.
El proceso de armonización se inspirará en los principios de aditividad tarifaria, de transparencia, de uniformidad y deberá reflejar los costes realmente incurridos en el abastecimiento de energía eléctrica, tomando como referencia los precios de los mercados.
Si bien se contempla el principio de autoorganización de los mercados, se establecen mecanismos de regulación, consulta, previsión y gestión de los mismos.
