ESTRASBURGO, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Eurocámara respalda limitar las inversiones no controladas de compañías públicas de países terceros, como Rusia, en el sector energético comunitario, y en particular en las redes de gas y electricidad. Los diputados reclaman además a los Estados miembros que diversifiquen más sus fuentes de suministro de energía para mejorar la seguridad de abastecimiento.
Estas propuestas se recogen en un informe aprobado este lunes por la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo por 45 votos a favor, 3 en contra y 4 abstenciones. El texto subraya que "el partenariado energético entre la UE y Rusia puede fundarse únicamente sobre los principios de no discriminación y de tratamiento equitativo, así como sobre condiciones iguales de acceso a los mercados".
Los eurodiputados insisten en la necesidad de que Rusia ratifique la Carta Europea de la Energía y destacan que, además, la UE debe dedicar un capítulo especial a sus relaciones energéticas con Rusia en el nuevo Acuerdo de Asociación y Cooperación, cuya negociación se encuentra bloqueada por el veto de Polonia.
La Eurocámara apoya la creación de "una política extranjera común de la UE en materia de energía que abarque la seguridad de suministro, el tránsito y las inversiones ligadas a la seguridad energética y la promoción de la eficacia energética y el ahorro de energía".
REPRESENTANTE ESPECIAL PARA LA ENERGÍA.
Para lograrlo, el informe aboga por designar rápidamente un "representante especial para la energía" que coordine las políticas nacionales y permita así a los Veintisiete defender mejor sus intereses en las negociaciones con países terceros. También apuesta por "crear un mecanismo de solidaridad" para hacer frente a las crisis provocadas por problemas de aprovisionamiento, la degradación de infraestructuras o cualquier otra situación de emergencia.
Los parlamentarios plantean varias vías para que Europa reduzca su dependencia de las fuentes extranjeras de suministro energético. Es "vital", según el texto, que la UE se mantenga en la vanguardia del combate mundial contra el cambio climático y que promueva las tecnologías de ahorro energético en todas sus relaciones con países terceros.
El informe insiste en la necesidad de que la UE diversifique sus fuentes de gas natural y dé prioridad a las fuentes de energía renovables y ecológicas y apoya "todos los esfuerzos destinados a superar la actual dependencia de los Estados miembros respecto (*) a las importaciones energéticas que provienen de países que violan sistemáticamente la letra y el espíritu de la Carta de Naciones Unidas".
