Los líderes del CCG piden a Irán mayor "transparencia" en torno a su controvertido programa nuclear

Actualizado: domingo, 7 mayo 2006 16:00


RIAD, 7 May. (EUROPA PRESS) -

Los líderes de Bahrein, Arabia Saudí, Kuwait, Omán, Qatar y Emiratos Arabes Unidos pidieron este sábado desde Riad al vecino Gobierno de Irán que se sincere con ellos en torno a su controvertido programa nuclear.

Los seis países integrantes del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) se reunieron en Riad, en un encuentro de carácter "consultivo" con el objetivo de discutir en torno a cuestiones como Irán Irak, la lucha contra el terrorismo, la situación en los territorios palestinos, según informó el ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudí, Al Faisal.

"Irán debería ser transparente con la región" en lo referente a su programa nuclear, comentó Zayed Al Nahyan, ministro de Relaciones Exteriores de los Emiratos Arabes Unidos.

Asimismo, agregó que las naciones del Golfo Pérsico buscarán garantías frente "a las amenazas ambientales" que representan los reactores nucleares iraníes, por considerar que es un problema no sólo de alcance regional, sino mundial. Por ello pidió a Teherán cooperar con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).

Los miembros del consejo, una alianza política y militar de naciones árabes, se muestran cada vez más preocupados por los programas nucleares de Teherán. Irán está ubicado del otro lado del Golfo Pérsico, frente a los integrantes del CCG.

Algunos se han mostrado particularmente incómodos por el reactor Bushehr, construido cerca de la costa de Irán, frente a Arabia Saudí y a unos 300 kilómetros de Kuwait.

En diciembre, durante una cumbre del consejo, el ministro de Relaciones Exteriores de Emiratos Arabes Unidos expresó su temor por el programa iraní. Algunos analistas locales también han advertido a los estados del Golfo Pérsico que no deben mantener "silencio" sobre este tema.

Los diplomáticos dijeron que además del conflicto nuclear iraní, los líderes también revisaron la situación de Irak después de la elección de sus nuevas autoridades. Algunos de los países del Golfo Pérsico --que tienen una población principalmente suní-- han manifestado sus preocupaciones por el gobierno controlado por los chiíes en Bagdad, muy cercanos a los chiíes de Irán.