La morosidad de la banca pierde la barrera del 12% por primera vez desde julio de 2013

People walk past a LaCaixa and Barclays bank offices in Barcelona
Foto: REUTERS
Actualizado: jueves, 18 junio 2015 11:01

MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -

La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas ha descendido al 11,95% en abril, algo por debajo de los niveles registrados en julio de 2013, cuando la tasa se establecía en el 11,97%.

Esta tasa incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito.

Según los datos provisionales hechos públicos este jueves por el Banco de España, la cifra total de créditos dudosos ha caído hasta los 161.615 millones de euros en abril. La tasa de morosidad encadena así ocho meses consecutivos de caídas, llegando a perder la barrera del 12% por primera vez desde julio de 2013.

En el mes de abril, el crédito global del sector se redujo en 22.947 millones de euros respecto al mes anterior, hasta alcanzar los 1,352 billones de euros. De este modo, la morosidad de la banca se ha reducido en 1,65 puntos porcentuales respecto al máximo histórico marcado en diciembre de 2013, cuando se situó en el 13,6%.

Sin incluir los cambios metodológicos, la ratio de morosidad se situaría en el 12,17%, una cifra por debajo del 12,3% registrado el mes anterior, puesto que el saldo de crédito caería desde los 1,350 billones de euros a los 1,327 billones.

Pese a todo, las entidades financieras aún mantienen sus provisiones, aunque las han reducido ligeramente en abril respecto al mes anterior, hasta los 94.937 millones de euros. En marzo, este 'colchón' se situó en 97.189 millones.

NIVELES ELEVADOS

El analista de XTB Jaime Díez ha explicado a Europa Press que después de ver unos datos de morosidad que mantienen el sesgo bajista y consolidan la "formación de techo", la duda radica ahora en el comportamiento de los créditos impagados a partir de mayo tras las fuertes caídas del mercado de bonos.

En este sentido, ha recodado que el mes de abril estabilizó los últimos descensos que vislumbraban la mejora en la salud de la economía española. "A pesar de ello, cabe destacar que las referencias continúan estando en tasas históricamente elevadas, por lo que sería un error dejar de prestar atención a la evolución de dicho dato", ha advertido el experto.

Díez ha destacado que, a pesar de las expectativas de aumento en los nuevos créditos, los dudosos han frenado su avance ayudados por los factores internos y externos, al tiempo que ha avanzado que aún queda "mucho camino por recorrer" para alcanzar niveles donde las entidades financieras "se encuentren cómodas y no sufran elevados riesgos en sus balances y cuentas de pérdidas y ganancias".

Así, ha augurado que los próximos datos podrían mostrar "ciertas dudas" tras el 'sell-off' (liquidación) vivido por el mercado de bonos durante los meses de mayo y junio, que ha disparado las rentabilidades de la deuda pública elevando las tasas de referencia como el Euríbor.

"Si bien estas referencias, obviamente, no estarán reflejadas en los créditos dudosos de abril, sí que lo estarán en las próximas revisiones", ha adelantado.

POSIBLE REDUCCIÓN DE LOS NUEVOS CRÉDITOS

En cualquier caso, Díez no espera un elevado incremento en la tasa de mora por dichas repercusiones, pero sí entiende que sería fácil ver una leve reducción en los nuevos créditos dado el avance del euro y las subidas de tipos interbancarios durante los últimos dos meses.

El analista de XTB ha insistido en que si se analizan los datos del mes de abril con un prisma mayor se observa que la tasa está "extremadamente lejos" de los niveles de 2007, cuando se situaba por debajo del 1%.

Adicionalmente, entiende que es necesario valorar que la nueva metodología ha rebajado la tasa de mora actual, "que sería ligeramente superior si se aplicaran los baremos antiguos".

No obstante, no pierde la esperanza y, a pesar de la negativa coyuntura vivida por los bonos, cree que se podría esperar un medio y largo plazo "potencialmente positivo" para el dato de impagos por la mejora económica y una vuelta a la baja de los tipos interbancarios, que ayudarán a que los nuevos créditos "sean de buena calidad y, en consecuencia, ayuden a la caída del ratio".