MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los expertos en fiscalidad prevén que el aumento de la tributación a los trabajadores desplazados a España con rentas superiores a 600.000 euros tendrá escaso impacto recaudatorio en las arcas públicas.
"El problema es el cambio a una tributación más dura respecto a una situación anterior, pero el impacto en la recaudación va a ser muy reducido", declaró el socio del área fiscal de Gómez-Acebo & Pombo Heribert Padrol.
En este sentido, Padrol apuntó que "debido al entorno económico será difícil que los clubes puedan asumir el aumento de la recaudación y en el ámbito empresarial tampoco parece que el impacto global vaya a ser muy significativo", sin embargo, en ambos casos serán las empresas las que asuman el aumento fiscal, debido a que tanto los futbolistas como los profesionales negocian los sueldos en neto.
El experto destacó que el impacto más previsible del aumento de la tributación para los no residentes será el encarecimiento de los contratos a los directivos de alto perfil y que no afectará al sector de la investigación, porque los sueldos de sus profesionales son inferiores a los 600.000 euros.
Por su parte, el abogado de CMS Albiñana & Suárez de Lezo experto en grandes patrimonios Jaime Ena apuntó que, a pesar de la aprobación de la comocida como 'Ley Beckam', España "no fue capaz de atraer tantos directivos con altas retribuciones que se pudieran beneficiar de este régimen, porque el incentivo fiscal no es suficiente".
Ena explicó que la tributación más favorable suponía "un gancho" para que una empresa extranjera se instalara en España o enviara a sus profesionales a trabajar, y que con el cambio, "la decisión será más complicada de tomar".
El abogado de CMS Albiñana & Suárez de Lezo destacó que los "grandes beneficiados" de la rebaja fiscal fueron los clubes de fútbol y que, tras el cambio, serán sus directivos los que tengan que negociar los sueldos netos que paguen a sus fichajes, teniendo en cuenta que tendrán que hacer frente a un aumento del 20% de la retención impositiva.
ERROR DE SALDO.
Por su parte, Padrol alertó del "planteamiento dudoso" existente en la redacción de la enmienda, ya que, según la nueva legislación, si una persona cobra 599.999 euros seguirá tributando al 23% lo que provoca el llamado "error de saldo" que supone que por cobrar un euro más la tributación aumentaría en más de un euro.
El experto destacó el "enorme salto" impositivo que se producirá entre los directivos que cobren 500.000 euros a los que reciban 600.000 euros, y apuntó que "la imprecisión de la norma" obligaría abrir una reflexión jurídica.
La medida, que no tiene carácter retroactivo, estipula que los nuevos fichajes a partir del 1 de enero de 2010 que supongan una retribución superior a los 600.000 euros anuales pasarán a tributar al 43% en el IRPF, mientras que el resto seguirá en el 24%.
Por el momento, ERC, que presentó la enmienda junto a IU a la que se unió en PSOE, ha sido el único que ha realizado cálculos asegurando que el Estado recaudará unos 100 millones de euros anuales con la modificación de la Ley.
