MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se ha mostrado este miércoles dispuesto a revisar la obligación que tienen las entidades sin ánimo de lucro que ingresan más de 50.000 euros anuales de presentar declaración por el Impuesto de Sociedades, en aras a evitarles problemas burocráticos que pongan en riesgo su funcionamiento o que les haga caer en infracciones tributarias.
Así lo ha asegurado durante la interpelación que el portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, le ha planteado en el Pleno del Congreso, recogiendo así el malestar del pequeño asociacionismo con esta obligación, introducida con la reforma fiscal que entró en vigor el pasado 1 de enero, dado que anteriormente estaban exentas de esta obligación si cumplían ciertos requisitos.
Aunque esa normativa preveía que todas las pequeñas organizaciones tuvieran que declarar por Sociedades, el ministro ha recordado que ya en febrero se modificó la normativa, a instancias de los nacionalistas catalanes en el Senado, para recuperar la exención para las microentidades que no superan los 50.000 euros de ingresos anuales ni los 2.000 euros de ingresos por rentas no exentas sometidas a retención, y cuyas rentas no exentas estuvieran sometidas a retención.
Un cambio que no es suficiente, según Sánchez Llibre, porque "todas las pequeñas asociaciones que tengan una pequeña actividad comercial, como vender lotería de navidad, han de presentar la declaración". "No lo sabíamos, si no hubiéramos sido los primeros en decirlo", ha señalado el diputado de CiU.
NO SE PERSIGUE BUROCRATIZAR
Por eso, ahora los nacionalistas catalanes quieren elevar el tope que marca la exención hasta los 100.000 euros, donde estaba antes de la reforma tributaria, y apelan a la "sensibilidad social" de Montoro para lograrlo.
Así, el ministro ha asegurado que el cambio normativo buscaba mejorar el control, pero no incrementar la recaudación ni "poner trabas" al funcionamiento de una sociedad civil que tiene un peso demasiado pequeño, a su juicio, en nuestro país y que, por tanto, se está tratando de fomentar con medidas como los incentivos al micromecenazgo.
Por eso, ha reiterado su disposición a "rectificar" y "considerar el caso de las entidades más modestas, a las que la obligación de declarar les pudiera ocasionar problemas de funcionamiento, hasta el punto de perjudicar su actividad", como se hizo en febrero.
Y dado que ese primer cambio se incluyó en el decreto ley de Segunda Oportunidad, que aún está en tramitación en la Cámara Baja como proyecto de ley, Montoro ha emplazado a los grupos a enmarcar el nuevo cambio en ese debate.
"Seguro que con espíritu constructivo la semana próxima (cuando se debatirá y votará la moción de CiU derivada de esta interpelación) podremos llegar a un acuerdo para dar una solución definitiva a este problema y evitar que una norma no recaudatoria se convierta en un coste para las pequeñas entidades. Seguro que habrá una gran coincidencia de todos los grupos", ha zanjado el titular de Hacienda.
Finalmente, Montoro ha defendido los efectos positivos de su reforma tributaria pero ha recordado que un cambio "de tanta profundidad" puede tener efectos no previstos y no deseados, que hay que ir puliendo con posterioridad.
TRABAJAR POR LA FELICIDAD DE LOS CIUDADANOS
Por su parte, Sánchez Llibre ha hecho hincapié en que unas 50.000 microentidades y más de 2 millones de voluntarios tienen "grandísimos problemas" para cumplir con su obligación de presentar declaración por Sociedades, lo que puede "acarrearles una multa o hacerles incurrir en algún defecto fiscal" e incluso llevarles a la "desaparición".
Y dado que el cambio que proponen los nacionalistas catalanes "no va a suponer ningún coste fiscal" para el Estado, CiU insiste en "reconocer la labor" social, cultura, deportiva y de otros tipos que realizan estas entidades mediante el cambio normativo.
"Se trata de posibilitar la felicidad de muchísimos ciudadanos que trabajan con objetivos sociales, sin ánimo de lucro, para que la sociedad pueda recibir unos servicios que, lamentablemente por falta de recursos, no pueden dar las administraciones públicas a día de hoy, sin que le cueste un euro", ha llegado a decir.
