Admite que el verano "ha truncado" las perspectivas de recuperación, aunque asegura que las cosas van "menos mal" de lo que dicen algunos
MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PSOE a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha mostrado partidario de "explotar" al máximo la reforma laboral que aprobó el Gobierno en septiembre de 2010 antes de plantearse la posibilidad de poner en marcha una nueva.
"Si luego no funciona y hay que discutir (la posibilidad de abordar una nueva), lo discutiremos", ha señalado Rubalcaba durante su intervención en los Desayuno Informativos de Europa Press, donde ha asegurado que el "adanismo laboral" es un "error".
Rubalcaba ha asegurado que la reforma aprobada por el actual Gobierno puede dar "mucho juego" y es, probablemente, "más aceptable" que la que otros tienen en la cabeza, por lo que hay que aplicarla a fondo, ya que incluye cosas "que no está haciendo casi nadie".
El candidato socialista ha explicado que la política laboral del PSOE, si gana las elecciones, se centrará en la realización de programas específicos de empleo para los diferentes sectores y colectivos, ya que no necesitan las mismas cosas una persona que acaba de salir del sistema educativo que una mujer que quiere incorporarse al mercado laboral o un parado de 53 años.
"Cada situación exige medidas distintas", ha señalado Rubalcaba, tras aseverar que tampoco necesitan las mismas políticas los diferentes sectores en los que se basa la economía española, como la construcción o el turismo. "Vamos a hacer programas específicos diferenciando tipos de parados y sectores", ha dicho.
Aún así, ha asegurado que todos serán programas de estímulo y pretenderán facilitar, subvencionar o bonificar la creación de puestos de trabajo. "Esa es la estrategia diseñada", ha subrayado, tras reconocer que para llevar a cabo estas políticas hace falta dinero, motivo por el que el Gobierno pretende crear un impuesto para grandes fortunas.
El candidato socialista no ha querido dar detalles del nuevo impuesto y se ha limitado a reiterar que la intención del Gobierno es rehacer el Impuesto sobre el Patrimonio para corregir "agujeros" y convertirlo realmente en un impuesto a las grandes fortunas, ya que hay mucha gente que tendría que pagar y no lo hace.
Rubalcaba ha insistido en la importancia de abordar lo "urgente e importante" en estos momentos en el país, como la elevada tasa de paro y el cambio del modelo productivo para conseguir una economía "sana y competitiva". A su parecer, este cambio debe hacerse restableciendo los equilibrios básicos de la economía, lo que supone ser más austeros sin recortar derechos sociales, ya que los retrocesos en derechos serán "poco rentables" y "muy difíciles" de recuperar.
GASTAR "MENOS Y MEJOR"
"Hay que ahorrar, gastar menos y mejor", ha señalado el candidato, tras asegurar que se pueden hacer muchas cosas haciendo ajustes en ingresos y gastos y gastando menos, tal y como lo están haciendo en estos momentos las empresas españolas. "Las administraciones públicas también pueden", ha añadido.
De la misma forma, ha destacado la importancia de ser beligerante contra el fraude fiscal, puesto que "hay formas de corregirlo", aunque es necesario adoptar una actitud "enérgica" y realizar un buen análisis de los gastos y los ingresos.
A su parecer, hay tres grandes retos por delante tanto en Europa como en España: el cambio climático, el envejecimiento de la población y el problema energético. En este sentido, ha resaltado la importancia de hacer un "esfuerzo" por cambiar el modelo energético en España y llevar a cabo así la que sería la "última" gran reforma estructural.
ABORDAR EL DÉFICIT TARIFARIO
En concreto, Rubalcaba se ha referido al déficit tarifario y ha recordado que es más elevado que el déficit sanitario anual, aunque no se hable de ello. "La cosa tiene bemoles", ha indicado, tras asegurar que si gana las elecciones abordará el problema energético, ya que, además, España es un país bien posicionado en energías alternativas y el camino que está marcando Europa pasa por ir abandonando la nuclear para meterse de fondo en las alternativas.
A pesar de queda por delante un tiempo "que no es fácil", Rubalcaba se ha mostrado optimista de cara al futuro: "No vamos a salir (de la crisis) en un mes ni dos ni tres, pero vamos a salir", ha señalado, tras recordar que lo importante es ver si España sale del ajuste respetando sus señas de identidad o alterándolas "profundamente".
ESPAÑA, "MENOS MAL" DE LO QUE DICEN ALGUNOS
En este sentido, ha admitido que el verano "ha truncado la tímida recuperación" de la economía, aunque ha asegurado que en España las cosas van "menos mal" de lo que algunos dicen y de lo que algunos parece que quieren.
Pese al debilitamiento de la recuperación, ha descartado que España estuviera al borde del rescate el pasado agosto, aunque el mes fue "muy difícil" tanto para España como para otros países que lo siguen pasando "muy mal", como Grecia, Portugal o incluso Italia, que ahora está peor que España, aunque eso "no debe ser un consuelo".
Respecto al nuevo rescate de Grecia, Rubalcaba ha lamentado que mientras los mercados se mueven a "velocidad digital", Europa lo hace a "velocidad analógica" porque el "problema de fondo" es la gobernanza económica de la UE. No obstante, ha resaltado que "poco a poco" se están poniendo "las cosas en su sitio", lo que augura una solución para el país heleno. También ha dado por hecha una próxima bajada de tipos por parte del BCE, aunque ha lamentado que la institución actúe con retraso en esta cuestión.
