IU-ICV, BNG, ERC y Amaiur rechazan el Pacto Fiscal porque "sacraliza el déficit cero" y piden más democracia

José Manuel García Margallo
CONGRESO
Actualizado: jueves, 21 junio 2012 14:20

UPyD, PNV, CiU y UPN confirman su respaldo al Tratado europeo


MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), el BNG, ERC, Amaiur y Compromís-Equo han anunciado este jueves su voto en contra de la ratificación del Pacto Fiscal Europeo en el Congreso por considerar que "sacraliza el déficit cero" y supone "más sufrimiento" para los ciudadanos, y han pedido más democracia para consultar a la ciudadanía su opinión sobre este acuerdo, así como avanzar en la construcción europea, un argumento con el que todas las formaciones políticas se han mostrado de acuerdo.

Así, el portavoz de IU-ICV-CHA, José Luis Centella, ha señalado que el tratado se basa "en los mismos instrumentos que han llevado a la crisis", comenzando por la austeridad, sin abordar las causas reales del "fracaso de la construcción europea" y sin proponer soluciones al crecimiento y al empleo. "Llaman austeridad a lo que es sufrimiento de la gente", ha afirmado.

A renglón seguido ha rechazado "ceder soberanía hacia ámbitos no democráticos de la UE para calmar a unos mercados cuyo único objetivo es obtener beneficios", y ha reclamado un referéndum para que sean los españoles los que decidan sobre "un proceso constituyente que se está realizando a espaldas de la ciudadanía". "Falta política, falta una Europa no supeditada a los mercados", ha subrayado.

ES UN TRATADO "INCUMPLIBLE" PARA ESPAÑA

El portavoz del BNG, Francisco Jorquera, sostiene que el Pacto es "incumplible" para España y que "no se pueden obtener resultados diferentes con las mismas medidas". "La austeridad como la aplican ustedes es simple ideología elevada a la categoría de ciencia, un eufemismo para encubrir recortes sociales", ha dicho.

Además, ha apostado por un cambio del modelo productivo, más inversión social y "más democracia", y ha aprovechado para criticar al Ejecutivo por "gobernar a golpe de decreto" y al presidente Mariano Rajoy por "negarse a comparecer ante la Cámara y por eludir" el Debate sobre el Estado de la Nación.

Por su parte, el portavoz económico de Amaiur, Rafael Larreina, de Eusko Alkartasuna (EA), considera que el pacto "no pone las bases para dar respuesta a los problemas" de los ciudadanos y, sin embargo, repercutirá negativamente en el modelo social. "Es importante abordar la reforma integral de la UE", sostiene.

Teresa Jordá, de ERC, ha lamentado que "la austeridad sadomasoquista de (Angela) Merkel la paguen las autonomías" y ha criticado que el tratado "reduzca" el margen de maniobra para impulsar la economía y "descuartice" los derechos sociales adquiridos. "Este Pacto es un brindis al sol, los compromisos adquiridos son imposibles de cumplir para España", ha añadido.

La diputada de Geroa Bai, Uxue Barkos, ha anunciado su voto en contra del tratado porque "sacraliza el déficit cero" y "preconiza una política que está ahogando el motor de la economía", mientras que el representante de Compromís-Equo, Joan Baldoví, ha rechazado el acuerdo por no haber sido consultado a la ciudadanía y porque "eleva el déficit cero a los altares" dejando a la gente "siempre por debajo en el orden de prioridades".

NO ES MOMENTO DE PARTIDISMO

Ante estas críticas, el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha insistido en que "ahora lo que toca es la convergencia fiscal y la disciplina presupuestaria para conseguir un crecimiento estable y volver a la creación de empleo" y ha negado que la actual situación sea culpa de la austeridad. "Si no, no será posible dar los pasos necesarios en la construcción europea, sería construir sobre arena", ha añadido.

"Si queremos mantener el Estado del Bienestar tiene que ser sobre unas bases que no son las que eran, las que el viento se ha llevado. Y, entre esas bases, está la austeridad. La economía no es un chicle infinito; si se estira demasiado los mercados cortan la financiación y se acaba la música", ha señalado, apuntando que ninguna otra reforma de las que son necesarias a nivel comunitario será posible si "todos los europeos no estamos convencidos de que todos cumplimos las reglas, de que el ahorro de unos no va a ir a un pozo sin fondo".

Por eso, ha defendido que "no es hora de luchas partidistas, de trinchera" sino de "un consenso nacional para abordar las necesidades de la economía nacional y de diseñar una política europea que podamos defender todos juntos en Europa". "Si en la UE aparecemos con voces separadas nuestra voz será silenciada. El resto de países acuerdan las grandes líneas de la política europea, y eso es lo que tenemos que hacer nosotros", ha insistido.

Con respecto a las críticas sobre el carácter poco democrático de estas decisiones, Margallo ha recordado que la intervención del Parlamento Europeo y de la Comisión garantiza ese carácter, y ha recordado que "no se puede avanzar en la construcción europea sin renunciar a parte de la soberanía nacional".

UNIDAD EN TORNO A LAS CUESTIONES IMPORTANTES

El portavoz económico de UPyD, Álvaro Anchuelo, ha anunciado el voto positivo de su grupo y ha reclamado al resto de grupos "altura de miras" para "lanzar un mensaje claro al exterior de que en las cuestiones importantes hay unidad en torno al proyecto europeo", si bien ha matizado que junto a esta "pieza" hacen falta otras como "una política fiscal común, la armonización fiscal o los eurobonos".

"Si hubiéramos incorporado a nuestro comportamiento el criterio de no gastar más de lo que se ingresa no nos encontraríamos así", ha continuado, subrayando la relevancia de que se trate de un pacto que afecta a todos los estados miembro y llamando la atención sobre las dificultades que implicará su cumplimiento.

El diputado de CiU Jordi Xuclá se ha congratulado de que este tratado se ratifique "con debate", y ha instado a los socialistas a cambiar su postura y apoyar el acuerdo porque es "momento para enviar un mensaje de confianza al conjunto de la UE y de los mercados" y para "cambiar de mentalidad y no hablar más de cesión de soberanía, sino de soberanía compartida": "Esta Europa debe tener un dialogo sincero con Alemania y evitar la ruptura psicológica entre norte y sur".

En cualquier caso, ha reconocido ser partidario de "combinar la austeridad con crecimiento", así como de avanzar en la profundización del proyecto europeo y de la unión monetaria por la vía de la federalización política y económica.

Por su parte, el portavoz parlamentario del PNV, Josu Erkoreka, ha anunciado que su grupo votará un "sí apremiante" que urgirá a Europa a "activar inmediatamente los mecanismos institucionales de que dispone para promover el crecimiento" y a "imprimir un papel más activo para el BCE y remover los obstáculos que dificultan la federalización económica".

"Ratificar este pacto fiscal no supone en absoluto renunciar a otros instrumentos de política económica para combatir los ataques a la deuda y favorecer el crecimiento. Ya no es una novedad reclamar el crecimiento; sólo falta Merkel, pero ya caerá. La fruta está madurando", ha ironizado el diputado vasco.

Finalmente, el diputado de UPN, Carlos Salvador, ha admitido que votar a favor "no va a suponer un plato de gusto" pero ha sugerido que se habría evitado "tragar esta píldora amarga" si se hubieran tomado medidas a tiempo.

Desde el PP, José María Beneyto ve "imprescindible resaltar ahora que la moneda única y el proyecto europeo son irreversibles e indisolubles" y, para ello, el primer reto es la consolidación fiscal en contraste con el "despilfarro" que achaca a los socialistas.