Casi la mitad cree que su entorno y vecindario son "poco o nada accesibles" y critican la falta de servicios
MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
Dos tercios de las personas con discapacidad que residen en localidades del medio rural o semi urbano (menos de 10.000 habitantes) tienen problemas de movilidad y necesitan adaptaciones parciales o totales en la accesibilidad arquitectónica y urbanística, según los resultados del estudio "Necesidades en el medio rural de las personas con gran discapacidad física y sus familias".
El estudio, realizado por la Plataforma Representativa Estatal de Discapacitados Físicos (PREDIF) con el apoyo de Caja Madrid, muestra además que sus familiares conviven con ellos una media de 20 horas al día y en la mitad de los casos no trabajan para dedicarse al cuidado de manera permanente.
Asimismo, el estudio denuncia que estas personas están más aisladas y tienen dificultades de acceso a servicios como el transporte la sanidad y el empleo, y por otro se enfrentan a barreras arquitectónicas, urbanísticas o de la propia orografía del terreno. Según los mismos datos, más de un 45 por ciento de los encuestados considera que su entorno y vecindario son "poco o nada accesibles".
DIFICULTAD LABORAL
Por otra parte, aunque un 83 por ciento de este colectivo se encuentra en edad laboral, tan solo uno de cada diez desempeña un trabajo. En la misma línea, según el estudio, casi un 40 por ciento de las personas con discapacidad presenta necesidades adicionales de atención sanitaria. Sin embargo, una cuarta parte de los municipios carece de centro de salud.
En cuanto a los servicios, centros y áreas de ocio y tiempo libre, los discapacitados emplean fundamentalmente los bares o restaurantes del pueblo, así como el entorno natural más accesible. Sin embargo, el estudio muestra que estos establecimientos obtienen las puntuaciones más bajas de accesibilidad.
Entre los problemas de accesibilidad también se encuentran los medios tecnológicos. Así, un 32 por ciento indica no disponer en su localidad de internet o de otros medios de comunicación, como el fax.
A pesar de todo, la mayoría de los encuestados (un 70 por ciento) manifiesta que no le gustaría nada vivir en la ciudad y señala entre las principales ventajas de vivir en el medio rural el "ambiente tranquilo" y el "apoyo social".
