Almunia impone una reducción de tamaño de más del 60% a la banca nacionalizada

Actualizado: miércoles, 28 noviembre 2012 23:02


MADRID, 28 Nov. (OTR/PRESS) -

La Comisión Europea ha impuesto una reducción de tamaño de más del 60% a la banca nacionalizada (Bankia, Catalunya Caixa, Novagalicia Banco y Banco de Valencia) hasta 2017, lo que supondrá recortar a la mitad su red de oficinas. Debido a esta medida, accionistas y titulares de preferentes y deuda subordinada sufrirán pérdidas de unos 10.000 millones.

Esta medida es la condición que exige Bruselas para autorizar una inyección de capital de 37.000 millones de euros del fondo de rescate de la UE (MEDE) con el fin de garantizar su viabilidad.

Concretamente, Bankia recibirá 17.960 millones de euros; Cataluña Caixa, 9.080 millones de euros; Novagalicia Banco, 5.425 millones; y Banco de Valencia, 4.500 millones, según se recoge en los planes de reestructuración de las cuatro entidades aprobados por Bruselas.

Además de estos 37.000 millones de euros, el MEDE inyectará un primer tramo de 2.500 millones de euros a la sociedad de gestión de activos inmobiliarios (Sareb), según ha anunciado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia.

Almunia ha eludido cuantificar el impacto de esta reestructuración en despidos. "Van a tener lugar, sin duda", pero "estamos ante una pregunta que debe ser contestada por las autoridades españolas y las entidades afectadas".

"Los responsables son quienes gestionaron mal estas entidades. Nos saldría una lista relativamente larga", ha apuntado. El Ejecutivo comunitario no ha obligado a las entidades a que apliquen 20 días de indemnización por despido, ha asegurado el responsable de Competencia.

Por otro lado, Bruselas autoriza la venta de Banco de Valencia a Caixabank por considerar que "no es viable como entidad autónoma". "Esta opción es más barata que liquidar el banco", ha dicho Almunia.

Por lo que se refiere a Catalunya Caixa y Novagalicia Banco, el Gobierno español se ha comprometido a vender las entidades antes de que acabe el periodo de reestructuración de cinco años. En caso de que no sea posible, las autoridades españolas deberán presentar un plan de liquidación ordenada.

Sobre Bankia, Almunia ha explicado que "se someterá a una reestructuración completa y será un banco mucho más pequeño que hoy en día, concentrado en las regiones históricas de las cajas que se fusionaron para crear BFA, así como en algunos otros centros de relevancia económica y financiera dentro de España".

Para llevar a cabo su reducción de tamaño, las entidades nacionalizadas deberán centrar su modelo empresarial en préstamos al por menor y préstamos a las pymes en sus principales regiones históricas. Y tendrán que abandonar las líneas de créditos a favor de promociones inmobiliarias y limitarán su presencia en el mercado al por mayor, lo que contribuirá a reforzar su capital y sus niveles de liquidez y reducir su dependencia de la financiación en el mercado mayorista y del BCE.

Almunia ha justificado estas restricciones alegando que "la historia pasada ha demostrado que (estas entidades) no son capaces de operar de manera eficiente en actividades de riesgo".

"La experiencia demuestra que en los casos de estas entidades su expansión más allá de las fronteras del territorio conocido ha conllevado altos riesgos. Igual que salirse del ámbito del modelo de negocio propio de una banca minorista ha comportado elevados riesgos que están detrás de la situación de pérdidas de estas entidades", ha dicho.

Todos los bancos se han comprometido a ceder algunas participaciones industriales y filiales, que la Comisión no ha concretado. El producto contribuirá a financiar la reestructuración y limitará la necesidad de ayuda adicional, además de reducir las distorsiones de competencia.

Bankia y Catalunya Caixa cederán los títulos de renta fija de su cartera de valores negociables y de tesorería. Catalunya Caixa cederá la totalidad de sus fondos de capital riesgo. Los beneficios irán a la propia reestructuración.

Según los planes de reestructuración aprobados por el Ejecutivo comunitario, los accionistas y titulares de preferentes y deuda subordinada deberán contribuir también a los planes de reestructuración. Su aportación reducirá la ayuda estatal necesaria en alrededor de 10.000 millones de euros, según los cálculos de Bruselas. Almunia no ha cifrado el porcentaje de quita que se deberá asumir en cada entidad.

Finalmente, todos los bancos se comprometen a limitar las remuneraciones de sus directivos según está previsto ya en la legislación española, no pagar cupón de instrumentos híbridos y no publicitar la ayuda pública ni usarla para prácticas comerciales agresivas. Además, tendrán prohibido realizar adquisiciones.

Almunia ha anunciado que el próximo 20 de diciembre aprobará la siguiente tanda de planes de reestructuración-Banco Mare Nostrum, Banco Caja 3, Liberbank and Ceiss-, pero no ha querido cifrar la ayuda del MEDE que necesitarán. El Gobierno estima que el importe total del rescate bancario se situará alrededor de 40.000 millones de euros.

UE DICE QUE ESPAÑA YA PUEDE RECIBIR EL RESCATE DE 39.500 MILLONES

Asimismo, la Comisión Europea y el BCE han dictaminado que España ya cumple todas las condiciones exigidas por la UE para recibir el primer tramo de 39.500 millones de euros del rescate bancario, en lo que se refiere a la reestructuración del sector y en ajuste presupuestario y reformas. Este desbloqueo se aprobará probablemente en el Eurogrupo del 3 de diciembre.

"Los servicios de la Comisión y el BCE consideran que España ha cumplido las condiciones exigidas" y "recomiendan desembolsar un primer tramo de la facilidad del MEDE, de alrededor de 39.500 millones", señala el primer informe de la 'troika' sobre este rescate.

No obstante, el informe reclama "rápidos progresos adicionales" para finalizar los planes de reestructuración de los bancos del grupo 2 (Banco Mare Nostrum, Banco Caja 3, Liberbank y Ceiss), como para poner en marcha el banco malo (Sareb), que debe estar operativo el 1 de diciembre.

"Aunque la aplicación de estas medidas está en general bien encarrilada, representan importantes piedras angulares del programa y exigen una toma de decisiones bien pensada y una aplicación eficaz con plazos ambiciosos, lo que va a ser un reto", dice la Comisión.

Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que España ha logrado "importantes progresos" en el proceso de reforma de sus sistema financiero, aunque advierte que aún están pendientes la implementación de los planes de reestructuración bancaria y la entrada efectiva en funcionamiento del banco malo.

Así, el FMI considera "difícil" que el banco malo se encuentre plenamente operativa en la "ambiciosa" fecha de finales de noviembre, señalando que "habría ayudado al proceso preparatorio que algunas decisiones clave se hubieran adoptado de manera más rápida".

Asimismo, Bruselas ha avisado de las "dificultades" a las que se enfrentará este banco malo para vender sus viviendas. El motivo es la competencia de las entidades que no han recibido ayudas públicas, que también quieren desprenderse de su cartera inmobiliaria y que pueden ofrecer financiación.

De hecho, las autoridades deberán realizar "grandes esfuerzos" para poner en marcha la entidad "en un plazo corto", ya que la Sareb debe estar operativa el 1 de diciembre y su creación exige "procesos largos y complejos".

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha afirmado que los aproximadamente 40.000 millones de euros del rescate europeo para el sector financiero tendrán un coste "claramente inferior" al 1% que se pagó por las inyecciones del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) decididas por el anterior Gobierno socialista.