La diferencia de precios en origen y destino se elevó a 800% en el caso de las frutas y verduras
PALMA DE MALLORCA, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
Gobierno balear remitirá a la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) el estudio realizado por varias consellerias sobre la evolución de los precios de los productos alimentarios básicos para que determine si ha existido alguna práctica anticompetitiva, como un posible pacto de mercado para inflar los precios por encima de la subida de los costes de producción.
Así lo anunció hoy en rueda de prensa el director general de Consumo, Diego González, para quien el estudio elaborado por las Consellerias de Salud y Consumo; Agricultura y Pesca; y Comercio, Industria y Energía, concluye que los precios que paga el consumidor han crecido más de lo que proporcional en relación a la evolución de precios en origen.
Según advierte, el aumento generalizado de los precios de los alimentos básicos perjudica el poder adquisitivo de las familias y puede, en consecuencia, afectar al consumo, que es uno de los motores de la economía. La investigación iniciada por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia tiene un plazo máximo de 18 meses para determinar si ha habido o no concertación de precios.
El informe explica que los criadores y productores alegan no haber incrementado los precios y que las grandes superficies niegan concertación de precios y aseguran que no son culpables de las fuertes subidas. "Sólo quedan los intermediarios y los mayoristas", añade el estudio del Govern.
Aunque la subida de los precios de los alimentos básicos que conforman la 'cesta de la compra' han experimentado en Baleares un incremento menor que en el resto de comunidades autónomas, la subida del precio final ha sido mucho mayor que la que han registrado los costes de producción y las materias primas.
Desde el pasado mes de junio, el índice de precios alimentarios en Baleares ha subido 6 puntos, el doble de lo que ha crecido el índice general (3). La mayor diferencia de precios entre origen y destino se detecta en las frutas y verduras de marca balear, ya que, a pesar de mantener precios estables y bajos en origen, se comercializan a precios que exceden el inicial en un 200, 500 e incluso 800 por ciento.
Tomando el ejemplo que plantea el estudio, el precio del limón, se ve que en origen se está pagando a 0,43 euros el kilogramo, mientras que el precio final en noviembre se situó en 1,80 euros el kilogramo --una diferencia del 418 por ciento--.
También destaca el caso de la leche, el precio en origen en Menorca es de 0,36 euros y se comercializa a 0,90 euros, un 250 por ciento de aumento. Los ganaderos alegan que pese a la subida del 22 por ciento entre septiembre y octubre del precio de la leche en origen (de 29 a 36 céntimos), el mismo sector en la península percibe por litro entre 42 y 46 céntimos.
Un litro de leche de la marca balear que más comercializa, Agama, se encuentra alrededor de los 0,80 euros, por debajo de la media estatal e incluso de las marcas líderes. En cuanto a la carne, el desfase entre el precio en origen y destino de la carne de cerdo es del 493 por ciento --de 1,27 a 6,26 euros--, mientras que en el caso del cordero es menor (166 por ciento) --en origen 7,33 euros el kilo y en destino 12,17 euros--.
El director general de Agricultura explicó que los ganaderos y agricultores de las islas no están repercutiendo en los precios que perciben las subidas de los costes a las que tienen que hacer frente, por lo que, para permitir la supervivencia del sector primario en Baleares, es necesario que se tienda a consumir producto balear, que permanece a precios competitivos y es de alta calidad.
Desde el Govern, se recomienda a los consumidores optar por marcas blancas y producto balear, adelantar la compra de Navidad para no tener que hacer frente a las fuertes subidas de última hora y evitar el sobreendeudamiento familiar, haciendo presupuestos previos y huyendo de los préstamos rápidos que pueden cundir en estas fechas.
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