MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consorcio integrado por ACS y la francesa Eiffage, concesionario de la conexión por ferrocarril de Alta Velocidad (AVE) Figueres (Girona)-Perpignan (Francia), podrían tener derecho a indemnizaciones por el retraso que sufrirá la conexión entre Barcelona y este paso trasfronterizo.
Así lo apuntó hoy el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, quien, no obstante, apuntó que aún es pronto para determinar si habrá que afrontar esa indemnización y en qué cuantía.
Según explicó, es preciso esperar a que la concesión ferroviaria se ponga en servicio y se vea el tráfico que tenga. "A partir de entonces se podrá estimar el coste que se podrá producir, o no, en la concesión", señaló.
En concreto, la eventual indemnización dependerá de la medida en que se pueda garantizar la utilización de la concesión a partir de su puesta en servicio, prevista para 2009, en tanto en se pone en explotación su conexión AVE con Barcelona, aplazada tres años hasta 2012.
Según Morlán, el tráfico de viajeros por este paso trasfronterizo se garantizará con la construcción de una variante y un intercambiador.
En concreto, los planes de Fomento pasan por que a partir de 2009 los trenes realicen el trayecto entre Barcelona y Figueres por la línea convencional. Una vez en esta última ciudad, prevé que gracias a un intercambiador de ancho de vías puedan realizar el paso de la frontera por la concesión.
En el caso del tráfico de trenes de mercancías, durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso, el 'número dos' de Fomento reconoció que aún está pendiente de estudio una solución para canalizarlo.
ACS y Eiffage, constructora gala de la que Sacyr Vallehermoso es primer accionista, construyen y financian las obras del AVE Figueres-Perpignan, ya ejecutado en sus dos terceras partes, según el Ministerio de Fomento.
En virtud del contrato, estas empresas recuperarán su inversión mediante el cobro de un canon o peaje por el paso y circulación de trenes por esta infraestructura cuya apertura se fijó para 2009 con el fin de que coincidiera con el calendario inicialmente previsto para el tramo Barcelona-frontera francesa, ahora aplazado.
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