CADIZ, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
CC.OO consideró hoy que los sindicatos necesitan negociar y acordar con las administraciones españolas un plan para Airbus en la línea de Francia, es decir, una línea de crédito blando "no para despedir a las plantillas sino para aguantarlas para que estén en disposición, como máximo en 2009, de suponer una capacidad productiva suficiente, haciendo un número de aviones que hagan al negocio remontar el vuelo".
En rueda de prensa en la capital gaditana, el responsable de Comisiones Obreras en la planta de Airbus en Puerto Real (Cádiz), Francisco Heredia, explicó que los sindicatos "han acomodado" el tiempo de la crisis a una solución que garantice que los empleados vuelvan a trabajar y, "como contrapartida" la dirección ha planteado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que visto "con más precisión y siempre que se garantice el retorno de los trabajadores podría ser una de las medidas".
En este sentido, de la reunión que mañana se celebrará con las direcciones de EADS CASA y Airbus, los sindicatos esperan una respuesta "clara y directa" a su propuesta de que los contratados de forma temporal "estarán a punto cuando remonte el número de aviones que hay que fabricar porque no podemos desaprovechar su altísima cualificación". En este sentido, reiteró que "necesitamos esa capacidad productiva para una carga de trabajo que va a incrementarse de forma extraordinaria".
De otro lado, Heredia afirmó que están pendientes de la reunión del próximo jueves en Bruselas, en la que por primera vez se reúne la Federación Europea de Metalúrgicos, que aglutina a los sindicatos de los diferentes países y que pretende crear una plataforma para negociar con EADS las medidas del Power 8, de las cuales "conocemos cinco. En ese escenario, la Federación de CC.OO ha situado sus objetivos, como "no aceptar ningún cierre de centro" porque, a su juicio, esta crisis "tiene una característica y es que nosotros no la hemos provocado".
En este sentido, el sindicalista consideró que España "no debería aceptar las medidas más dolorosas", anunciadas desde la nueva presidencia europea de Airbus, una empresa "con muchos intereses políticos de una complejidad extraordinaria", en torno a la cual los sindicatos "tenemos que buscar soluciones a los contratos pendientes, alternativas como colchón a la crisis y esperar".
Además, a juicio de Francisco Heredia, los sindicatos tienen que salvaguardar "el único proyecto con entidad para competir con Boeing" y preservar "un modelo industrial diferente" al de la empresa aeronáutica norteamericana, "con un 95 por ciento de sus contratos fuera de sus instalaciones, algo que Europa no puede consentir".
