Economía.- La Junta de Andalucía quiere "impedir por todos los medios" un cierre "ilegal e injustificado" de Delphi

Actualizado: miércoles, 21 marzo 2007 21:28

Vallejo asegura que en Andalucía no existe ningún proceso de "deslocalización" de industrias


SEVILLA, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Innovación, Ciencia y Empresa, Francisco Vallejo, aseguró hoy ante el Pleno del Parlamento que la Junta de Andalucía tiene claro que hay que "impedir, por todos los medios", que Delphi lleve a cabo el cierre de su factoría en Puerto Real (Cádiz), una decisión, a su juicio, "injustificada, ilegal y premeditadamente forzada" y pidió el apoyo de la oposición a las medidas que se adopten.

Insistió en que "es incuestionable el compromiso" de la Junta con el mantenimiento de la actividad industrial de Delphi y con la creación de empleo, y pidió que este caso o el de la empresa Vitelcom, en Málaga, no sean utilizados para "cuestionar la realidad industrial" de Andalucía, donde no hay ningún proceso de "deslocalización" de industrias, sino casos puntuales.

Durante una comparecencia ante el Pleno de la Cámara, Vallejo señaló que la única responsable de la situación que hoy se vive en la factoría de Delphi en Puerto Real es la dirección de la multinacional, que ha tomado una "decisión unilateral y drástica de cierre", por lo que lamentó las críticas que se han vertido contra la Junta, que sólo contribuyen, a su entender, "a restar fuerza" a la importante labor de presión social e institucional.

"Creemos que hay impedir por todos los medios que Delphi lleve a cabo una decisión de cierre que es injustifica, ilegal y premeditadamente forzada", sentenció el consejero, que apuntó que la decisión de cierre y la petición de un concurso de acreedores no se justifica con lo que está diciendo la empresa, aludiendo a pérdidas continuadas durante cinco años, para justificar esa actuación.

"No hay quien pueda justificar la decisión de la empresa, que no puede ser aceptada ni jurídica ni políticamente", sentenció Francisco Vallejo, que recordó que hace tan sólo un año, Delphi planteó un plan industrial viable para la factoría de Puerto Real, donde dos de las tres plantas de la factoría "son rentables y dan beneficios".

En opinión de Francisco Vallejo, el cierre responde "más bien a intereses muy distintos que pueden estar más bien situados en los intereses de otras empresas en otras latitudes" y consideró que existe una "estrategia deliberada dirigida a llevar a la empresa a una situación que pudiera justificar el cierre".

Respecto a Vitelcom, señaló que se trata de la crisis de una empresa de alta tecnología, con baja capitalización y ventas muy elevadas. Señaló que la Junta ha colaborado con Vitelcom y Telefónica para abordar la búsqueda de posibles socios que compraran las acciones y continuaran la actividad, lo que no ha sido posible por la actual deuda de la empresa. No obstante, confió en que a partir de una reducción de la deuda viva, se pueda continuar con actividad en la empresa.

El consejero recalcó que las crisis de Vitelcom y de Delphi hay que abordarlas desde el "rigor", apuntando que, en modo alguno, son consecuencia de la política industrial ni de actuaciones de la Junta. Dijo que, sin duda, se trata de dos casos que pueden tener "graves repercusiones", cada uno de ellos con génesis distintas y abordajes singulares. Recalcó que se trata de "dos casos puntuales" que están siendo utilizados "desde ciertas latitudes para cuestionar la realidad industrial de Andalucía", donde, según apuntó, no existe "ningún proceso de deslocalización industrial".

Pese a que la reducción del peso de la industria en las zonas desarrolladas es un hecho común, el sector industrial andaluz, según Vallejo, presenta un "comportamiento y resultados excepcionalmente positivos". Por ello, señaló que adoptar un "discurso fatalista", alejado de la situación real, es "falsear la realidad y una tremenda irresponsabilidad que puede perjudicar al sector". Resaltó que, actualmente, Andalucía es la segunda comunidad de España en número de empresas industriales. Dijo que en la región hay 33.000 empresas que van "muy bien" y dos que tienen un problema, mientras acusó a la oposición de querer trasladar que existe un proceso de "deslocalización" generalizado, "inventando problemas todos los días".

"IRRESPONSABILIDAD Y COBARDÍA".

Por su parte, el diputado del PP Salvador Fuentes manifestó que la "crisis" industrial que hay en la comunidad es fruto de la "indolencia, la irresponsabilidad y la cobardía de un Gobierno ausente, que ha vivido durante años del cuento de la segunda modernización". Preguntó al consejero como tiene la "cara" de decir que su prioridad es la industrial, cuando la Junta "consiente y calla ante la tragedia y el sufrimiento de más de 2.000" familias que se pueden ver afectadas por el cierre de Delphi en Puerto Real. Indicó que la "deslocalización" industrial en Andalucía es una realidad, con casos como Delphi, Vitelcom o la situación del sector naval.

El diputado de IU Pedro Vaquero señaló que el balance del consejero sobre el sector industrial andaluz es "muy triunfalista" y reclamó un plan contra la deslocalización de empresas en la comunidad, mientras acusó a la Junta de considerar que la mejor política industrial es aquella que "no existe".

La portavoz del grupo andalucista, Pilar González, criticó la "frivolidad" de la Junta cuando habla del tejido industrial andaluz, porque Andalucía no cuenta "con un sector industrial fuerte y consolidado", sino que, por el contrario es "débil", ya que desde la administración, se ha actuado siempre "a salto de mata", sin exigir compromisos por parte de la empresas que se asentaban en la región. Los casos de Delphi y Vitelcom, a su entender, ponen de manifiesto la "fragilidad" del sector industrial andaluz.

El parlamentario del PSOE José Blanco señaló que, para el PP, están "en crisis" empresas que los gobiernos del PSOE han logrado reflotar y que los gobiernos del PP tenían "previsto" cerrar como Astilleros o Altadis. La oposición, según dijo, al criticar los procesos de innovación que está impulsando la Junta, sólo entiende como industria "una fábrica con una chimenea que echa humo" porque se ha quedado en el siglo XVIII o en el feudalismo, apuntando que no le están haciendo ningún favor a los trabajadores de las empresas.