MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
UGT ha asegurado que "apoya cualquier movimiento accionarial en Telefónica que aporte estabilidad a la plantilla" tras conocerse que el Gobierno ha ordenado a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) --organismo dependiente del Ministerio de Hacienda-- la compra de hasta un 10% del accionariado de la operadora presidida por José María Álvarez-Pallete.
Este movimiento convertiría a la SEPI en el principal accionista de Telefónica por delante de la 'teleco' saudí STC (9,9%) y del núcleo estable que hasta ahora encabezaba BlackRock con el 4,98%, seguido de BBVA (4,84%), y CaixaBank (3,5%).
"La anunciada entrada de la SEPI con un 10%, que convertiría al Estado en el mayor accionista de Telefónica, y la más que posible entrada del fondo saudí STC, con un 9,9%, refuerzan el posicionamiento en Bolsa de la compañía", ha destacado UGT en un comunicado.
Según el sindicato, este fortalecimiento "garantiza la españolidad de Telefónica" y "debe eliminar las incertidumbres existentes sobre la posible venta de activos de valor de Telefónica hacia terceros actores", como ha sucedido recientemente con la venta de la red fija de Telecom Italia a un fondo de inversión, ha ejemplificado la organización.
ERE Y CONVENIO COLECTIVO
Telefónica y los sindicatos se encuentran inmersos en estos momentos en la negociación del despido colectivo que la compañía aplicará en sus tres principales filiales en España (Telefónica de España, Móviles y Soluciones) y que afectará --según la última propuesta de la operadora-- a casi 4.000 empleados.
A ello se suma la negociación en paralelo del nuevo convenio colectivo de empresas vinculadas (el actual es una prórroga del anterior y expira el 31 de diciembre), dos procesos que deben estar finalizados en torno al 4 de enero de 2024.
"UGT valora positivamente este movimiento, pues entiende que debe repercutir en una mejora de las condiciones laborales y sociales de los trabajadores de Telefónica", ha agregado el sindicato en su comunicado.
Además, considera que la entrada de la SEPI debería posibilitar la aceptación de sus postulados y propuestas de mejora por parte de la dirección de Telefónica en el marco de la negociación del convenio colectivo.
"Aportando de este modo garantías, estabilidad y el blindaje de derechos de la plantilla reclamados desde nuestra organización", ha subrayado UGT.
En cuanto al despido colectivo, UGT cree que el proceso abierto por Telefónica no se verá afectado por la decisión del Ejecutivo.
"Estamos seguros de la posibilidad de llegar a un acuerdo para que la desvinculación de los compañeros sea mayoritariamente voluntaria y con unas rentas que, en cualquier caso, garanticen el mantenimiento de su poder adquisitivo, lo que sumado a nuestra petición de un compromiso de contratación de talento joven, permitirá que la repercusión para la economía del país sea positiva a la vez que se apuesta por la continuidad del negocio y la creación de empleo", ha valorado el sindicato.
No obstante, UGT ha solicitado al Gobierno que esta inversión se vea acompañada de un "cambio regulatorio que promueva la competencia en infraestructuras y empleo".
"La innovación tecnológica, la creación de valor añadido y el empleo de calidad deben ser el eje de crecimiento del sector de telecomunicaciones nacional y europeo. Una evolución necesaria para descartar la senda de destrucción de puestos de trabajo que ha caracterizado el devenir de las operadoras en los últimos años", ha resaltado.
Sumados-Fetico, otro de los sindicatos presentes en la negociación del despido colectivo y del nuevo convenio en Telefónica junto a UGT y CCOO, también ha celebrado la decisión del Gobierno de entrar en la compañía.
"Me alegro de que el Estado entre a formar parte del accionariado de Telefónica. Respecto a la negociación que tenemos actualmente, no creo que tenga ninguna consecuencia", ha matizado sin embargo el portavoz de Sumados-Fetico en declaraciones a Europa Press.
