ROMA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Millones de personas se enfrentarán este año a la amenaza del hambre en Sur de Sudán si no se actúa con urgencia, según un informe conjunto publicado por Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PAM).
El informe 'Misión de evaluación de cultivos y seguridad alimentaria en Sur de Sudán' se basa en una misión conjunta de evaluación realizada por ambas agencias de la ONU en la nación más joven del mundo entre octubre y noviembre de 2011, a petición del Ministerio de Agricultura y Bosques sursudanés.
El informe indica que el nivel de inseguridad alimentaria ha sufrido una brusca subida. El número de personas en situación de inseguridad alimentaria pasó de 3,3 millones en 2011 a 4,7 millones en 2012, de los cuales cerca de un millón sufren de inseguridad alimentaria grave, en comparación con las 900.000 de 2011.
Si continúa la situación de conflicto y el desplazamiento de la población y los precios siguen subiendo, la misión calcula que el número de personas en situación de inseguridad alimentaria grave podría duplicarse.
Las malas cosechas, el aumento de la demanda, el rápido incremento de los precios, los conflictos, los desplazamientos de la población y el alto número de retornados figuran entre los motivos de la situación, agravada por una producción cerealera deficitaria, afectando a comunidades que están ya muy necesitadas.
"Se trata de una crisis que se avecina con rapidez y que el mundo no puede permitirse ignorar", aseguró el director del PAM en Sur de Sudán, Chris Nikoi. "La situación es desesperada, y estamos tratando de hacer todo lo posible para estar preparados, pero ya no hay tiempo", añadió.
"Hay que lograr que las familias tengan en primer lugar acceso rápido a alimentos inocuos y nutritivos, así como a otras necesidades básicas, pero para restablecer y mantener la seguridad alimentaria y nutricional en Sur de Sudán necesitamos romper el círculo vicioso del incremento del hambre y la pobreza", señalo el responsable de la oficina de la FAO en Sur de Sudán, George Okeh. "Podemos hacerlo ayudando a la gente a retomar las actividades agrícolas, ganaderas y de otro tipo en las que basan sus medios de subsistencia", advirtió.
COSECHAS
Según la evaluación, la producción nacional de cereales en Sudán del Sur en 2011 fue un 19 por ciento inferior a la del año anterior y un 25 por ciento por debajo que la media de los últimos cinco años. Se calcula que el déficit cerealero para 2012 sea de más de 470.000 toneladas, lo que supone casi la mitad de las necesidades de consumo totales del país para el año.
Las escasas lluvias al comienzo de la estación agrícola han sido el principal culpable de la disminución de las cosechas, con un conflicto en curso que agrava el problema, al interrumpir las actividades agrícolas habituales.
Aparte, el limitado suministro de alimentos resultante coincide con un momento de un importante aumento de la demanda por el flujo de sursudaneses que regresan a sus tierras desde Sudán y los desplazados desde las zonas de conflicto.
En circunstancias normales, unos mercados que funcionasen correctamente habrían soportado la combinación de suministro insuficiente de alimentos y el aumento de la demanda. Sin embargo, según el informe, el cierre de los pasos fronterizos entre el nuevo país y Sudán han paralizado el suministro habitual de alimentos básicos hacia los mercados de Sur de Sudán.
Aunque el déficit alimentario resultante ha sido parcialmente compensando con productos de países vecinos, las largas distancias a través de carreteras en mal estado, el elevado precio de los combustible y la depreciación de la libra de Sur de Sudán, han llevado a niveles muy altos a los precios de los alimentos en el mercado, añade el estudio.