Actualizado 04/10/2012 21:20

La Fundación Caja Rural del Sur dona a Huelva un monumento dedicado al Inca Garcilaso

Inauguración Del  Monumento Al Inca Garcilaso.
EUROPA PRESS/FUNDACIÓN CAJA RURAL DEL SUR

HUELVA, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Caja Rural del Sur ha donado a Huelva un monumento dedicado al Inca Garcilaso. Así, por iniciativa de la Embajada de Perú en España y gracias a la disposición del Ayuntamiento de Huelva, el busto de Gómez Suárez de Figueroa, el Inca Garcilaso de la Vega, ocupa a partir de este jueves un lugar de honor en la Casa Colón.

De este modo, según ha informado la Fundación Caja Rural del Sur, en la programación del Otoño Cultural Iberoamericano, OCIb 2012, también hay tiempo para el homenaje y el recuerdo a personajes que a lo largo de la historia han contribuido a unir las dos orillas del Atlántico. Es el caso del conocido como Inca Garcilaso de la Vega, historiador y escritor nacido en Perú en 1539 y fallecido en España en 1616, que ya tiene un busto donado por la Fundación Caja Rural del Sur a la ciudad de Huelva, gracias a la iniciativa de la Embajada de Perú en España y de su Consulado en Sevilla y a la disposición y colaboración del Ayuntamiento de Huelva.

En el acto de inauguración han participado, además del alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, y del presidente de la Fundación Caja Rural del Sur, José Luis García Palacios, el cónsul general de Perú en España, Óscar Guillermo Barrenechea Núñez del Arco, y ha asistido, así mismo, el antiguo cónsul del país andino, Humberto Urteaga, que ocupaba el cargo cuando se concibió el proyecto del monumento.

El presidente de la Fundación Caja Rural del Sur, entidad que ha donado a la ciudad la escultura, ha reconocido que la del Inca Garcilaso ha sido una figura que "siempre me ha atraído".

"Fue la primera figura importante de la literatura americana y nunca renunció a ninguna de las partes que conformaban sus orígenes", ha destacado García Palacios del cronista mestizo, al tiempo que ha confesado su convencimiento de que Huelva sería el lugar idóneo para ubicar el monumento.

Por su parte, el cónsul general de Perú, Óscar Barrenechea, ha descrito a Garcilaso como "espiritualmente, el primer peruano que existió". "En él se fundieron las dos figuras antagonistas de la conquista", ha remarcado Barrenechea, quien ha agradecido a los representantes de las instituciones y a los ciudadanos asistentes porque "su presencia revela la importancia que le dan al mestizaje". También ha agradecido al anterior cónsul que comenzase con la gestión de la creación del monumento.

Por último, el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, ha incluido este nuevo busto como una nueva pieza en el proceso de monumentalización que está experimentando Huelva y con el que "reconoce su identidad", y ha recordado también el momento en el que José Luis García Palacios le propuso erigir esta escultura: "lo acepté inmediatamente y ambos estuvimos de acuerdo en que la Casa Colón era el lugar indicado, este maravilloso hotel creado para conmemorar precisamente el IV Centenario del Descubrimiento".

Gómez Suárez de Figueroa, que así se llamaba el Inca Garcilaso, fue hijo del conquistador extremeño Sebastián Garcilaso de la Vega y de la princesa inca Isabel Chimpu, o ñusta, como se conocía en quechua a las princesas de Perú, país especialmente invitado en la pasada edición del Otoño Cultural Iberoamericano.

Su obra cumbre, 'Comentarios Reales de los Incas', es una de las más importantes obras literarias del periodo colonial peruano, y muestra una crónica de la civilización incaica desde su fundación hasta la llegada de los conquistadores españoles. Aunque la controversia ha perseguido al texto desde su publicación en 1609, -- algunos autores y estudiosos afirman que la versión del Inca Garcilaso es sesgada por ser Suárez de Figueroa descendiente directo de los dirigentes del imperio--, lo que es probado es su valor testimonial sobre la cultura, costumbres, religión o sistema de gobierno, de este periodo, y su utilidad como fuente para los estudios americanistas.

Una segunda parte, titulada Historia General del Perú, fue publicada a título póstumo en 1617 y se adentra en los acontecimientos de la conquista y las guerras civiles que se produjeron a continuación. El autor es el artista peruano Miguel Baca Rossi, uno de los escultores más importantes del momento, maestro a la hora de reflejar con exquisita perfección la anatomía y los rasgos y expresiones de aquellos a los que inmortaliza.