Los amigos de Wilson declinan identificar en la Sala a sus agresores por "miedo" a las represalias de otros 'Latin'

"Agarré a mi amigo. Parecía un perrito a punto de morir y trató de decirme algo. No pude hacer nada", recordó un testigo

Europa Press Sociedad
Actualizado: jueves, 25 septiembre 2008 17:17
MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los amigos de Wilson Fernando Ríos Ordóñez, el menor que murió en septiembre de 2005 a manos de un grupo de 'Latin Kings' en Plaza Elíptica (Usera), declinaron hoy en el juicio contra seis acusados del asesinato identificar a sus agresores por "miedo" a las represalias que puedan dispensarles otros miembros de esta banda latina o los familiares de los procesados.

"No quiero mirar a los individuos que casi me quitan la vida. Su mirada me da miedo. Tengo miedo a que sus familias me vean. Tengo miedo a que se venguen", manifestó con voz quebrada y tras un biombo Jhon Peter C.M, el joven que recibió dos puñaladas durante el ataque lanzado por una decena de 'Latin' como venganza de la muerte de Danny Paul M.A., alias 'Locote', asesinado veinticuatro horas antes por un grupo de Ñetas en Sáinz de Baranda.

La noche del crimen, Jhon Peter se encontraba en una parada del autobús, junto a Wilson, Ronald R.R. y Mauricio A.M. "Es cuestión de segundos, dos grupos de 'Latin' nos rodearon, nos dijeron que éramos los de la pelea del día anterior y comenzaron a atacarnos. No nos dio tiempo a reaccionar. Nosotros no pertenecíamos a ninguna banda", relató el joven, quien especificó que, cuando trató de huir, le alcanzaron y le acuchillaron "por delante y por detrás". "Nunca imaginé que nos iban a atacar. No nos dieron opción a saber por qué lo hacían. Todavía me preguntó por qué", dijo.

Según el fiscal, el principal acusado Luís A.C., alias 'king Fénix', sacó un cuchillo del interior de un periódico y dio una puñalada a Wilson por la espalda. Tras ello, Carlos Eduardo Y.M., 'Carloco', apuñaló a Jhon Peter C.M. ante lo cual los jóvenes salieron corriendo. Wilson fue alcanzado por el grupo rival. Así, 'king Fénix' y 'Carloco' asestaron varias puñaladas al joven que le ocasionaron un shock hipovolémico por hemorragia masiva, causa de su fallecimiento.

Al ser preguntado por el abogado Ildefonso Goizueta, que representa a la acusación particular, sobre si quería identificar a los agresores, Jhon Peter contestó: "Psicológicamente estoy mal. Estos individuos quisieron quitarme la vida. Ya no soy el que era antes. Gracias a Dios estoy vivo, de milagro".

"PARECÍA UN PERRITO A PUNTO DE MORIR"

Por su parte, otro de los amigos del fallecido, Ronald R.R., trasladó a los magistrados de la Sección Cuarta su deseo de no reconocer a los autores de las puñaladas. "No quiero identificar a nadie porque tengo miedo a represalias de otros 'Latin'. Me he ido a vivir a Toledo para tener una nueva vida", adujo. Además, el joven pidió a la Sala protección policial para abandonar las dependencias judiciales.

Ronald contó al tribunal que Wilson tenía "el ojito malo" por una operación y el grupo de 'Latin' pensó que el hinchazón se debía a la pelea de Saínz de Baranda. "Enseguida sacaron un cuchillo de un periódico y le dieron una puñalada. Salimos corriendo, pero Wilson se cayó. Un grupo de 7 ó 8 'Latin' se abalanzó sobre él. Le patearon, mientras que otros le apuñalaban", relató.

Al mismo tiempo, Mauricio A.M., otro de los jóvenes que estaba con Wilson, logró huir del escenario del crimen, pero uno de sus perseguidores le amenazó con matarle cuando le encontrase. "Eché a correr. Al mirar para atrás, vi que varios chicos rodearon a Wilson", apuntó.

Tras dar esquinazo a los dos 'Latin' que le perseguían, Mauricio regresó a Plaza Elíptica para ver lo que le había sucedido a su amigo. Le encontró tirado en el suelo. "Agarré a mi amigo. Parecía un perrito a punto de morir y trató de decirme algo. No pude hacer nada", recordó. Tras ello, el joven llamó a la Policía y a una ambulancia.

Mauricio también declinó identificar a los agresores. En su día, manifestó a la Policía que podría volver a reconocer a los asesinos de Wilson, pero esta mañana optó por no hacerlo. "Tengo una nueva vida. He vuelto a nacer. Tengo miedo a que me reconozcan y me pase algo por la calle. No estoy dispuesto a identificar a nadie", concluyó.

La Fiscalía pide para los seis procesados penas de 36 y 35 años de prisión por asociación ilícita, asesinato y tentativa de asesinato.Si se les condena, deberán indemnizar con 120.000 euros a los padres de Wilson y con 24.915 euros al otro joven que resultó herido en la reyerta.

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