Así se desprende de la Encuesta Escolar sobre Drogas, que resalta el descenso coca, hachís, alcohol y tabaco y el aumento del éxtasis
MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consumo de drogas en general entre los adolescentes madrileños descendió en 2006 respecto a años precedentes, aunque la edad media en el inicio de consumo de este tipo de sustancias se mantiene en los entre los 13,2 años en tabaco y los 15,3 años en cocaína, según los resultados de la Encuesta Escolar sobre Drogas 2006 de la Comunidad de Madrid presentados hoy por la viceconsejera de Sanidad, Belén Prado.
Durante su intervención, Prado indicó que, con respecto a la encuesta de 2004, se ha producido un descenso significativo en cocaína, más leve en cánnabis, alcohol, tabaco e inhalantes, y un pequeño repunte en tranquilizantes, drogas de diseño, alucinógenos, anfetaminas y heroína.
La viceconsejera se mostró satisfecha porque el consumo de drogas en general se sitúa por debajo de la media nacional, ha descendido el consumo y ha aumentado la percepción del riego, y la bajada ha correspondido más a chicas que a chicos, "pero preocupa las tempranas edades de consumo y se continuará trabajando para mejorarlo".
La Encuesta Escolar sobre Drogas se realiza cada dos años entre escolares de la Comunidad de Madrid de entre 14 y 18 años. En esta edición se ha contado con una muestra de 3.055 cuestionarios cumplimentados en 71 centros escolares. Sus objetivos principales son estimar la prevalencia de consumo de las distintas sustancias y la opinión de los encuestados relacionados con el abuso de drogas.
MÁS DE LA MITAD BEBEN ALCOHOL
El 52,3 por ciento de los escolares encuestados son consumidores habituales de bebidas alcohólicas, frente al 63,5 registrado en 2004, lo que supone una reducción relativa del 17 por ciento, un descenso más pronunciados en las féminas que en los varones, que vuelve a ser los que más bebe. La edad media del consumo se sitúa en los 13,7 años, la misma que en la anterior encuesta. En el último año han ingestado alcohol el 70,3 por ciento de los adolescentes (77,7% en 2006) y lo ha probó alguna vez el 75,9 por ciento (78,1% hace dos años).
La sustancia tóxica más consumida por los adolescentes de la Comunidad de Madrid es el tabaco. El 29,7 por ciento de los chavales entre los 14 y 18 años es consumidor habitual, mientras que el porcentaje registrado en 2004 era de un 30,6 por ciento, y alguna vez lo ha probado el 35,2 por ciento, igual que en 2006. La edad media del consumo de cigarrillos se fija en 13,2 años, casi la misma que en 2004, 13,3 años. La cantidad de tabaco consumida también está disminuyendo, ya que pasó de 7 cigarrillos hace dos años a los 5,6 actuales. Las chicas siguen fumando más que los varones.
Asimismo, el cánnabis es la droga de tráfico ilegal más consumida entre los púberes madrileños, aunque ha experimentado un apreciable descenso. El 20,4 por ciento de los escolares encuestadores eran consumidores habituales, frente al 26,2 por ciento obtenido en 2004, lo que implica una baja del 5,8 puntos, una reducción relativa de la prevalencia de un 21,6 por ciento en dos años. La encuesta también señala que probaron el hachís alguna vez el 34,2 por ciento (43,1% en 2006) y en el último año, el 28,2 por ciento (37,4% hace dos años); y que la edad media de inicio alcanza los 14,5 años.
LA COCAÍNA, LA DROGA QUE MÁS DESCIENDE
Por otro lado, la cocaína ha experimentado el mayor descenso relativo de su consumo habitual, un 50 por ciento en 2006 respecto al 2004. Así, hace dos años el 3,4 por ciento de los escolares madrileños eran clientes habituales de cocaína, porcentaje que se ha reducido al 1,7 por ciento en 2006, mientras que lo probaron alguna vez el 4,7 por ciento (7,9% en 2004) y en el último año el 3,6 por ciento, el doble hace dos años. La edad media de comienzo se situó entre los 15,3 años.
Entre las sustancias adictivas más minoritarias, se encuentra el consumo de tranquilizantes sin receta médica, que ha superado a la cocaína y se ha convertido en la cuarta droga más habitual. La edad media de inicio ronda los 14 años y el 2,6 por ciento de los escolares madrileños de 14 y los 18 años dice consumir esta droga, mientras que era el 2,4 por ciento en 2004. Luego le siguen las drogas de diseño, entre las que se encuentra el éxtasis, que ha subido del 1,2 al 1,4 por ciento en dos años.
Por otro lado, el uso de alucinógenos y las anfetaminas repunta en este estudio, ya que sus consumidores pasan del 0,8 al 1 por ciento, cuando en la anterior encuesta había descendido. La heroína, cuyo consumo estaba prácticamente erradicado en 2004, ahora es consumida habitualmente por 0,3 por ciento de los adolescentes. En cuanto a la forma de ingesta de esta droga, la venopunción está prácticamente descartada, por lo que se consume fumada o esnifada. Por el contrario, los inhalentes pasan del 0,9 al 0,8 por ciento entre 2004 y 2006.
CRECE LA PERCEPCIÓN DEL RIESGO
Por otra parte, la encuesta indica igualmente que se ha incrementado la percepción del riesgo de los escolares sobre el consumo de drogas para todas y cada una de las sustancias estudiadas. De este modo, más del 98 por ciento de los escolares considera que el consumo habitual de cocaína, heroína, éxtasis o anfetaminas puede provocar bastantes o muchos problemas. En el otro extremo de la balanza se sitúa el alcohol, ya que un 57,6 por ciento de los testados considera que su consumo habitual en fines de semana puede provocar bastantes o muchos problemas. En el medio se encuentran la percepción de riego del tabaco, con un 88,7 por ciento; el cánnabis, con un 90,6 por ciento; y los tranquilizantes, con 88,9 por ciento de prevalencia.
Las consumidores apuntan, entre las causas del consumo, la integración en el grupo de amigos, sobre todo entre los chicos y como recurso para olvidar los problemas. El 11,5 por ciento de las escolares menores de 18 años respondieron de esta manera.
El patrón de uso habitual de drogas es el policonsumo, es decir, el consumo habitual de varias sustancias simultáneamente. El caso extremo de este tipo de consumo es el de cocainómanos, puesto que todo ellos consumen además alcohol de forma habitual. El consumo de drogas se produce, por este orden, en bares, discotecas, domicilios particulares y en la calles, sobre todo en forma de 'botellón', aunque esta práctica es más frecuente entre universitarios que entre estudiantes del segundo ciclo de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato.
La encuesta también intenta conocer otros datos relacionados con el tema tratado. Así, Prado explicó que el 27,8 por ciento de los escolares entre los 14 y los 18 años salen dos o más noches por semana y el 20,2 por ciento no sale nunca. La hora de llegada de los que salen se sitúa de media entre las 0.00 horas a los 14 años y las 4.00 horas a los 18. Por otro lado, los adolescentes disponen una 'paga' media de 24,13 euros por semana los menores de 18 años y de 58,88 euros cuando han alcanzado la mayoría de edad.
Los adolescentes, al igual que el resto de los consumidores de estupefacientes, afrontan una posible adicción años después del primer consumo, por lo que la edad de la mayoría de los 18.500 pacientes atendidos por este tipo de dolencias se sitúa entre los 22 y los 30 años. De ellos, el 25 por ciento llegan a los centros de atención a drogodependientes por consumo de cánnabis.
Por último, la viceconsejera de Sanidad destacó los 225 millones de euros invertidos por la Comunidad de Madrid en esta materia y reiteró el compromiso del Gobierno regional "para hacer el máximo esfuerzo en la prevención del consumo de drogas, como se ha venido haciendo hasta ahora".
