Un chamán indígena, galardonado por el jurado del Premio Bartolomé de las Casas por su defensa del pueblo yanomami

MADRID 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

David Kopenawa Yanomami, portavoz y chamán indígena, recibió hoy en Madrid una Mención Honorífica otorgada por el jurado del Premio Bartolomé de las Casas, en reconocimiento a su trabajo en defensa de los derechos del pueblo yanomami y de otros pueblos indígenas brasileños.

"Mi trabajo es llevar el mensaje del pueblo yanomami fuera de él. Nací para luchar, y mi lucha es defender a mi pueblo", señaló Kopenawa en referencia a su apellido, que le fue dado por su pueblo y que significa 'luchador'.

Kopenawa, que comenzó con una introducción en yanomami y agradeciendo el premio concedido, realizó un breve repaso a la historia de su pueblo y se centró en los daños que han hecho al mismo los 'pescadores de oro', cuya entrada, cifrada en unos 40.000, en los años ochenta produjo grandes daños a los terrenos de este pueblo indígena.

También destacó que uno de los grandes problemas a los que se enfrentan los yanomami es la sanidad. "Los 'pescadores de oro' trajeron las enfermedades, como la malaria, una enfermedad desconocida para nosotros", indicó. "La salud en nuestra tierra es una cuestión muy difícil, el Gobierno federal de Brasil mira al pueblo de la ciudad y no quiere mirarnos, los indígenas no tenemos ni médicos", continuó.

"El Gobierno y la gente de la ciudad tienen el deber de cuidar a los indígenas", aseguró. Asimismo, ensalzó la labor del ex presidente brasileño Fernando Collor de Mello con respecto a su pueblo, ya que logró demarcar sus territorios y expulsar a los colonos que intentaban encontrar oro.

Por contra, declaró que el Gobierno del presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, sólo es "mitad amigo". "Hace algunas cosas, pero debería mirar más a nuestro pueblo", especificó.

Por último, destacó la creación de la asociación Hutukara para defender la naturaleza. "Nuestro pensamiento es crear una barrera para no dejar entrar al blanco en nuestra tierra, porque tiene dueño y es sagrada", apuntó. "Ahí están los cementerios, están enterrados nuestros antepasados (...), y los yanomami llevamos viviendo allí miles de años, por eso no se puede buscar oro allí", aseguró. "Esto es importante para todos nuestros nietos (...), el hombre blanco siempre quiere más y más recursos naturales, y hacer minería a gran escala", lamentó.