Actualizado 02/10/2009 14:40

La crecida de un lago a causa del tifón amenaza a unos 100.000 residentes cerca de Manila


MANILA, 2 Oct. (Reuters/EP) -

Al menos 100.000 personas que residen alrededor de un lago cercano a la capital de Filipinas, Manila, cuyas aguas han crecido a causa del tifón, deberán ser reubicados porque es poco probable que el nivel del agua baje en dos o tres meses, según explicaron el pasado viernes varios funcionarios.

El nivel del agua aumentó a 1,2 metros en la Laguna Bay debido a las altas precipitaciones que provocó el tifón Ketsana el pasado sábado, sumergiendo la región de la capital Manila y dos provincias cercanas, dijo el jefe de la Autoridad de Desarrollo del Lago Laguna, Edgar Manda.

"Tenemos que llevar a cabo la evacuación en las zonas de peligro. Las prolongadas inundaciones de estas zonas pueden provocar importantes riesgos para la salud", explicó Manda que también agregó "Es el momento de hacer cumplir la reubicación forzosa. Debe hacerse lo más pronto posible". Y afirmó que el agua podría subir aún más con otro tifón cuya llegada a las provincias del noroeste se prevé para este sábado.

Filipinas declaró el estado de alerta en todo el país el viernes como "súper tifón" de Parma, con ráfagas que han provocado hasta 230 kph (143 mph) en el centro. Decenas de miles de personas que residen en las proximidades del lago de 90.000 hectáreas están aisladas en sus casas debido a las inundaciones. Electricidad, comunicaciones y servicios de agua potable en algunas de estas áreas se ha cortado. Además, muchas personas todavía están esperando las ayudas de socorro.

Basándose en experiencias pasadas, Manda ha indicado que el desastre podría durar entre dos y tres meses para que los niveles de agua bajen y vuelvan a la normalidad. El nivel del agua en la Laguna de Bay, uno de los mayores lagos de agua dulce en el sudeste de Asia, subió a un máximo récord de 14,62 metros en 1919, debido a un tifón. Mientras que en 1978, otro tifón provocado por las lluvias hizo que el nivel de la altura del agua se situara con una altura de 13,58 metros.

"Lo ocurrido el sábado pasado fue totalmente inesperado cuando el agua se elevó a 13,81 metros en la altura del tifón Ketsana", ha explicado otro funcionario de la autoridad del lago, Jun Mystica, que también afirmó que a la inundación ha contribuido el sistema de drenaje obstruído en la capital, la elevada segmentación de los sistemas fluviales, la destrucción de las cuencas hidrográficas y la construcción de viviendas en los humedales alrededor del lago.

(EUROPA PRESS)