- La UE y Japón pretenden crear un pacto sustituto del de Kyoto que comience en 2012 con más firmas que su predecesor
HAMBURGO/MADRID, 1 Jun. (OTR/PRESS) -
Los ministros de Exteriores de la UE y los países asiáticos se han reunido hoy en la ciudad alemana de Hamburgo. En el maletín, los representantes europeos llevaron la propuesta de un nuevo pacto climático que sustituya al de Kyoto y que, a diferencia de éste, cuente con más respaldos. El abanico de la propuesta incluye también a los dos países más poblados del planeta, India y China, para que se comprometan a reducir sus crecientes emisiones a la atmósfera y así combatir el cambio climático. Sin embargo, China no está muy por la labor y, por el momento, rehusa luchar conjuntamente con Europa contra el cambio climático, del que no se siente "culpable", pero ante el que ya está poniendo medidas por su cuenta.
El país con el mayor potencial humano y la economía emergente más poderosa rechaza figurar junto a otros Estados en un nuevo pacto. Tratará de combatir el calentamiento global y tendrá vigencia a partir de 2012, pero sus líneas deberían quedar trazadas antes de 2009. Precisamente éste es uno de los temas centrales de la reunión mantenida por más de 40 representantes de Asuntos Exteriores de la UE y de varios países asiáticos.
Los políticos europeos quieren sumar a China, India y otros Estados de ese continente a los esfuerzos ecológicos, con la esperanza de que EEUU acabe cediendo y comprometiéndose también. Sin embargo, el ministro chino de Exteriores, Yang Jiechi, mostró un primer rechazo a la iniciativa porque no considera a su país "culpable del problema". No obstante, añadió que sí toman actualmente medidas para reducir sus emisiones.
APERTURA DE FRONTERAS
El protocolo de Kyoto se ratificó en 1997 sin que los resultados efectivos hayan alcanzado las aspiraciones teóricas, en parte por la exclusión de algunos Estados importantes, entre ellos China o EEUU. Las negociaciones del nuevo acuerdo comenzarán en Bali, Indonesia, el próximo diciembre.
China instó en el encuentro de Hamburgo a la UE a colaborar con los países en vía de desarrollo para compartir con ellos tecnologías 'verdes'. Sin embargo, la postura comunitaria es condicionar está generosidad ecológica a la apertura de fronteras chinas a bienes y servicios procedentes del viejo continente. Los Veintisiete ayudarán a China con tecnologías energéticamente eficientes siempre y cuando los límites y aranceles se reduzcan.
Las conversaciones para la firma de un nuevo macroacuerdo energético proseguirán en distintos escenarios. La canciller alemana, Angela Merkel, tiene previsto llevar la propuesta a la próxima reunión del G-8 para tratar de convencer a las principales potencias. El portavoz del Ministerio de Exteriores japonés, Mitsuo Sakaba, subrayó no sólo la importancia de que los países desarrollados suscriban el acuerdo, sino que destacó que "hay aún un gran número de países asiáticos indecisos".
