ADDIS ABEBA, 1 Sep. (Reuters/EP) -
Dos dirigentes opositores etíopes han sido detenidos por la Policía de su país después de que ambos se reunieran con una delegación de Amnistía Internacional (AI) y con una misión de la BBC que investigaba abusos contra los Derechos Humanos, según informaron fuentes opositoras.
El Gobierno ha asegurado que los detenidos son sospechosos de "terrorismo" y que podrían permanecer encarcelados sin cargos hasta un periodo de 28 días por sus supuestos vínculos con los rebeldes del Frente para la Liberación de Oromo (OLF), un grupo armado que combate desde 1993 por la independencia de la región de Oromo.
Tanto las organizaciones de Derechos Humanos como los donantes internacionales han criticado la ley antiterrorista aprobada el año pasado por el Gobierno de Etiopía.
Varios representantesd de la principal coalición opositora, Medrek, aseguraron ayer miércoles a Reurtes que Bekele Gerba, diputado por el Movimiento Federalista Democrático de Oromo(OFDM), y Olvana Lalesa, líder del Congreso del Pueblo de Oromo (OPC), se habían reunido la semana pasada con una delegación de AI.
Asimismo, fuentes opositoras precisaron a Reuters que ambos habían cooperado con una delegación de la radiotelevisión pública británica (BBC) que investigaba sobre la supuesta denegación de las ayudas alimentarias a miembros de la oposición.
"El sábado, las fuerzas de seguridad del Gobierno los detuvieron", declaró a Reuters el ex presidente etíope, y dirigente de Medrek, Negaso Gidada. "El OFDM y el OPC denunciaron recientemente las detenciones en la región de Oromia y el hambre en Etiopía. Ha muerto gente y al Gobierno no le gusta esto", añadió.
Un portavoz gubernamental ha asegurado que la Policía tiene pruebas de que ambos han cooperado con las milicias de OLF. "Bekele Gerba y sus cómplices han sido detenidos por supuesta implicación en actividades terroristas organizadas por el OLF", declaró el portavoz, Shimeles Kemal. "Sus detenciones no se deben a otro motivo que el de sus vínculos con el terrorismo", agregó.
Por su parte, Amnistía Internacional confirmó ayer miércoles que sus delegados se habían reunido con ambos la semana pasada y precisó que sus representantes fueron expulsados del país el mismo día de las detenciones. El Gobierno no ha confirmado este extremo.
