MADRID 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un total de 3.067 hombres condenados por delitos relacionados con la violencia de género siguen un programa específico de tratamiento mientras cumplen su pena en régimen abierto, según afirmó hoy la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo. Esos programas apuestan por la "reeducación" de los penados e incluyen tratamiento psicológico.
Estos programas constituyen, a juicio de Gallizo, "lo mejor que puede hacer nuestro sistema en la lucha contra esta lacra social". Por esa razón, la directora de Prisiones espera que los 66 centros penitenciarios y más de Centros de Internamiento Social que dependen de su departamento cuenten antes de que acabe la legislatura con programas de este tipo.
La cifra de 3.067 presos siguiendo el programa es del pasado mes de enero y supone un incremento del 225 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, cuando eran objeto de este programa era de 942 condenados.
La Ley Integral sobre la Violencia de Género comenzó a penalizar como delito agresiones que antes eran consideradas solamente faltas. Por ejemplo, las amenazas leves se empezaron a sancionar con prisión de seis meses a un año. En caso de lesiones, se agravó la pena de dos a cinco años cuando la víctima sea la esposa o compañera sentimental, aunque no haya habido convivencia. Esto hizo crecer el número de hombres que eran condenados por agredir de una forma u otra a sus parejas y que podían acceder al régimen abierto, lo que posibilita la aplicación del citado programa.
Gallizo ofreció estos datos durante las jornadas 'La intervención de las ONG en prisiones', que se celebran hoy y mañana en La Casa Encendida de Madrid. En su ponencia, la directora de Instituciones Penitenciarias defendió la implicación de las ONG en los presos que cumplen condena tanto en las cárceles como en régimen abierto o semiabierto.
En total son 305 las organizaciones no gubernamentales que colaboran con Prisiones, lo que supone que, por ejemplo, estén presentes en el 21 por ciento de actividades para la inserción laboral de los reclusos o en el 19 por ciento de las que persiguen su integración social.