MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que remita al Tribunal Penal Internacional (TPI) las violaciones de los Derechos Humanos cometidas durante las recientes manifestaciones en Siria, en las que alrededor de 400 personas han muerto a manos de las fuerzas de seguridad desde el pasado mes de marzo.
El Consejo de Seguridad no consiguió llegar esta pasada noche a un acuerdo para condenar la represión en Siria, por lo que sus quince miembros se volverán a reunir este miércoles. Reino Unido, Francia, Alemania y Portugal defendieron un texto de condena al uso de la fuerza contra los manifestantes, pero Rusia y China, con derecho a veto, se opusieron.
"El Gobierno sirio está, claramente, intentando destrozar la voluntad de los que expresan pacíficamente su disidencia bombardeándolos, disparándoles y encarcelándolos", declaró el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty.
"El Gobierno sirio y sus fuerzas de seguridad se sienten con derecho a actuar con impunidad desde hace tiempo y el resultado lo vemos ahora, en los actos sangrientos que han cometido estos últimos días en las calles de Siria", prosiguió.
"El presidente Bashar al Assad y los que le rodean deben comprender que sus actos tendrán consecuencias y que la comunidad internacional les pedirá cuentas individualmente, por la vía penal, ante el Tribunal Penal Internacional o ante los tribunales estatales con jurisdicción internacional por los disparos contra sus propios ciudadanos", advirtió.
Amnistía también ha reclamado la imposición de un embargo amplio de armas contra Siria y el congelamiento de los bienes en el extranjero del presidente Al Assad y del resto de personas implicadas en la represión y en graves abusos contra los Derechos Humanos.
