ATENAS, 31 Oct. (Reuters/EP) -
La presidenta de Amnistía Internacional, Irene Khan, pidió al ganador de las elecciones presidenciales en Estados Unidos que cierre el centro de detención de la bahía de Guantánamo en sus primeros 100 días de gobierno.
Además, pidió al Congreso norteamericano que investigue la violación de los Derechos Humanos cometidos en la prisión y por las fuerzas estadounidenses en Irak y Afganistán durante la Administración de George W. Bush y que tome medidas contra los responsables.
"Espero que cualquiera de los candidatos que gane preste especial atención a devolver a Estados Unidos al estatus de defensor de los Derechos Humanos tanto en su casa como fuera", explicó esta veterana abogada nacida en Bangladesh.
Tanto el candidato demócrata, Barack Obama, como su rival republicano, John McCain, han pedido en varias ocasiones el cierre del centro de Guantánamo, en el que todavía permanecen detenidas 255 personas, muchas de ellas sin cargos formales. Concretamente, McCain ha afirmado que los presos deben ser trasladados a la prisión militar de Fort Leavenworth, en Kansas.
"Ambos candidatos ya han dicho que buscarán la forma de cerrar Guantánamo... De verdad espero que le presten atención en los primeros 100 días", declaró Khan a varias agencias de noticias en el marco de una conferencia sobre corrupción en Atenas.
Más de 750 personas no estadounidenses han estado detenidas sin juicio en la base de Guantánamo desde que la prisión fue inaugurada como centro de internamiento de sospechosos de terrorismo en la guerra iniciada por la Administración Bush tras los atentados del 11 de septiembre.
Por otro lado, la presidenta de Amnistía Internacional afirmó que espera que "Estados Unidos lleve a cabo una investigación en el Congreso... y tomen medidas contra todos aquellos responsables de abusos contra los Derechos Humanos", refiriéndose a la detención ilegal de sospechosos y a las guerras de Irak y Afganistán.
Finalmente, Khan pidió a la comunidad internacional que apoye la petición de orden de detención contra el presidente sudanés, Omar Hassan al Bashir, por presunto genocidio en el conflicto de Darfur. La Unión Africana (UA) ha solicitado al Consejo de Seguridad de la ONU que bloquee la petición, ya que considera que podría suponer un revés para los esfuerzos por lograr la paz en la región.
