La directora general de Trabajo de la Junta, Sandra Pacheco. - EUROPA PRESS
MÉRIDA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un total de quince empresas extremeñas cuentan actualmente con el sello de responsabilidad social empresarial (RSE), así como otras cinco disponen ya de la auditoría positiva, por lo que se sumarán a esta lista próximamente, y otras 53 se encuentran registradas para iniciar el proceso de certificación.
Estos datos los ha dado a conocer este jueves la directora general de Trabajo, Sandra Pacheco, en declaraciones a los medios de comunicación antes de presidir la sesión ordinaria del Consejo Autonómico para el Fomento de la Responsabilidad Social de Extremadura.
Este foro, que cuenta con 26 miembros y donde está representada la Junta, la patronal, los sindicatos y representantes de la sociedad extremeña, con presencia de sectores como el de los autónomos, la dependencia o el medio ambiente, se reúne por primera vez desde 2013, fecha desde la que ha estado paralizado.
Esta nueva reunión pretende, por tanto, ser el "pistoletazo de salida a que funcione de verdad", en tanto que se trata del órgano colegiado que se encarga de "impulsar y decidir la responsabilidad social" en la comunidad autónoma, ha señalado Pacheco.
En concreto, en este primer encuentro se va a informar a los miembros sobre la Estrategia de Responsabilidad Social Empresarial de Extremadura 2018-2020 suscrita por la Junta y los representantes socioeconómicos en el marco de la concertación social.
Entre las novedades avanzadas, ha señalado que se crearán unos premios para reconocer las buenas prácticas empresariales, que pretenden servir de "aliciente" a otras empresas de cara a iniciar el camino hacia la consecución del sello de RSE.
Según ha explicado, para obtener este sello las empresas deben atender a los estándares nacionales e internacionales en esta materia, entre los que se encuentran el cumplimiento de los derechos de los trabajadores, de las políticas igualdad, medioambientales y de gestión de residuos, transparencia y control de las cuentas, entre otras.
De esta forma, las empresas interesadas en iniciar el proceso tienen a su disposición a los técnicos de la Oficina de Responsabilidad Social, donde han elaborado un manual "muy sencillito" con todos los pasos que deben ir dando.
Se trata, por tanto, de que una empresa "sea algo más" para contar con un "sello de calidad, de diferencia", que al medio y largo plazo aporta "productividad y competitividad" a las organizaciones que lo poseen.