SANTIAGO DE COMPOSTELA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la industria forestal gallega advirtieron hoy de que se podrían perder 3.000 empleos directos este año en el sector como consecuencia de una caída "muy significativa" de la demanda de madera y productos derivados y, por tanto, de la producción a raíz de la crisis de la construcción en España y de la economía global que comenzó a afectar a las firmas de la comunidad desde el segundo semestre de 2008 y "especialmente" en el último trimestre.
Representantes de este ámbito de producción afirmaron que "no hay que descartar" expedientes de regulación de empleo (ERE) en los próximos meses "si las circunstancias no mejoran", pese a no haber ninguno en marcha por el momento. Entre noviembre y diciembre las firmas del sector registraron las más acusadas caídas de la demanda, del 30 por ciento en el caso de la primera transformación y del 50 por ciento en la segunda.
"Las empresas empiezan 2009 con pérdidas asumidas, conscientes de que pierden dinero, stockajes muy importantes y previsiones de consumo y económicas nada halagüeñas", expuso hoy la secretaria xeral de la Federación Empresarial de Aserradores y Rematantes de Maderas de Galicia (Fearmaga), Ana Oróns, en la presentación de los resultados de la industria forestal el pasado ejercicio.
Las firmas gallegas de la primera y segunda transformación de la madera facturaron 2.259 millones de euros en 2008, un 6 por ciento menos que el año anterior, lo que llevó a los agentes del sector a considerar que los años de "bonanza económica" y de "crecimiento exponencial" llegaron a su tope.
Sin embargo y pese a las dificultades experimentadas por las empresas, sus representantes consideraron las cifras del pasado ejercicio "un buen resultado" que, como apuntó Oróns, estarían "dispuestos a firmar en 2009".
"Apenas se destruyó empleo", señaló, tras atribuir esta circunstancia al impulso de medidas de flexibilización, como por ejemplo la reducción en un 5 por ciento del número de horas trabajadas. Las industrias del sector generan unos 26.000 puestos de trabajo directos y otros 50.000 indirectos.
No obstante, la representante de Fearmaga, Monte Industria, Juan Picos, Cluster de la Madera, Belén Varela, y Federación de Empresarios de Carpintería y Mobiliario (Feceg), Francisco Javier González, insistieron en reiterar que carecen de más "alternativas para seguir aplicando medidas de flexibilización laboral".
"CUIDADOS PALIATIVOS"
Esta situación, sumada a las pérdidas derivadas del ciclón 'Klaus' a finales de enero, llevó a los representantes del sector a demandar "cuidados paliativos" a la Administración Pública, más allá de las reiteradas peticiones de carácter estructural que este ámbito de producción ha venido reclamando en los últimos años y vinculadas a la valorización de la superficie forestal gallega, según recordó Picos (Monte Industria).
Varela apuntó que el Cluster de la Madera ha negociado con las consellerías de Traballo, Economía y Vivenda para promover un plan Renove de viviendas, que promocione el uso constructivo de madera bajo criterios "de sostenibilidad, energético y técnico". Pese a no haberse "cerrado" ninguna actuación, avanzó que ese trabajo "está muy avanzado". Sin embargo, Picos reclamó a la Xunta la adopción de "medidas concretas", una solicitud que ya trasladaron a la Consellería de Traballo en una primera reunión mantenida en diciembre.
Así, pese a valorar las líneas de formación de personal, las calificaron de "parche" o de "pan para hoy y hambre para mañana", como matizó Francisco Javier González (Feceg), quien instó a "buscar" más medidas de actuación.
PROBLEMAS DE CRÉDITO E IMPAGOS
A las dificultades generadas por el 'parón' de la actividad de la construcción e inmobiliaria en España y el descenso de la demanda de madera y productos derivados en los mercados internacionales se han sumado los problemas de crédito que registran las empresas y que, como denunció Varela (Cluster de la Madera), "hacen inviables muchas operaciones comerciales". Por ello calificaron esta cuestión de "muy seria".
Una de las evidencias de esta situación la constituyeron los impagos, que, como indicó Oróns, se incrementaron el año pasado. "No los conocíamos en el sector", señaló.
DIFERENCIA ENTRE SUBSECTORES
Los resultados de cada uno de los subsectores que conforman la industria forestal revelaron un comportamiento diferenciado ante la situación de 2008. Así, los rematantes --cortan y retiran la madera del monte-- experimentaron un crecimiento del 11 por ciento en su facturación, que alcanzó los 416 millones de euros, tras cortar 8 millones de metros cúbicos de madera el año pasado, la "más alta de toda la historia documentada de cortas de Galicia".
Esta circunstancia se derivó de la escasez de materia prima en los mercados internacionales y el crecimiento de precios de la madera hasta el segundo semestre de 2008. No obstante, los aserraderos vieron reducido en un 7 por ciento su volumen de negocio, que ascendió a 340 millones de euros.
Por su parte, las empresas de tablero y pasta de papel registraron una disminución del 10 por ciento de su facturación, que se situó en los 817 millones de euros. Sin embargo, las firmas dedicadas a la segunda transformación fueron las más afectadas, con una caída del 11 por ciento que mantuvo su volumen de negocio en los 686 millones de euros.
En este subsector, las empresas más perjudicadas fueron las orientadas al mobiliario de cocina, baño y componentes orientados a la construcción, que experimentaron caídas en la demanda de entre un 15 y 20 por ciento, mientras que en el caso de las de carpintería o las dedicadas a locales comerciales y hoteleros ese descenso se rondó el por ciento.
Éstas últimos, como defendieron, resistieron mejor en un principio al participar en actuaciones como el plan Renove de turismo, alianzas con empresas del sector textil presentes en mercados internacionales, así como de recuperación de cascos históricos o rehabilitación de viviendas particulares.