Mujeres + hombres

Hay muchas formas de verlo, la de quienes consideran que toda discriminación positiva en defensa de impulsar la igualdad de la mujer con el hombre o todo repudio de la violencia de género, el simple concepto, "de género", es feminismo aído, y que mezclar lo accesorio y lo esencial como hace a diario la ministra desnaturaliza lo segundo, mezclar que no hay desigualdad tolerable por pequeña que parezca, por ejemplo, con que hay que decir "miembras" y si no eres un machista irredento; los que piensan que estas cumbres sólo de, con y para mujeres como la de la mujer africana que se ha celebrado este fin de semana en Valencia pecan de lo que critican y retrasan lo que dicen pretender, otra forma del mismo sexismo insufrible de siempre, el machismo, que en vez de erradicar lo que hace es repetir el patrón machista de toda la vida solo que al revés; otros que opinan que el secreto para apoderar o empoderar como dicen algunos a las mujeres (darles poder, vamos) es avanzar desde la guardería hacia paisajes cada vez mas mestizos, de razas y de sexos, hacia una sociedad de mujeres y hombres confundidos en la tarea de mejorar la vida, no a mitad y mitad sino encumbrando a los mejores, sean niños o niñas, en vez de crear un matrix en el que ellas y solo ellas sean quienes se ocupan "de sus cosas" (como cuando eran 'las reinas de la casa' se ocupaban de "sus labores", mientras en muchos de ellos que nunca fueron machistas empieza a anidar el rencor del príncipe arbitraria e injustamente destronado.

Distintos puntos de vista, todos con su puntito de razón, en mi opinión, sobre si se puede acabar y -lo más importante- cómo con la discriminación ancestral y generalizada en prácticamente todas las culturas de la mujer respecto al hombre, sobre la que personalmente yo albergo una única convicción firme: que el punto de encuentro posible entre todos los que nos acercamos a este debate de buena fe es que el sexo que se cree superior es en realidad el inferior. Mejor dicho, que los miembros del sexo que dicen ser superiores al otro, son los verdaderos "inferiores" en humanidad y cultura. Sean mujeres u hombres.

Ayer, en Vic (Barcelona), un hombre de 35 años fue arrestado como presunto autor de la muerte violenta de su mujer, de 33 años, y casi al mismo tiempo, una mujer de 64 años murió en la localidad de Atzeneta del Maestrat (Castellón) tras recibir un disparo presuntamente de su marido, de 66; otra vez, y ya van doce en lo que llevamos de año. Escribo de esto habiendo tanta tela política que cortar porque por lo que está fallando la ley para protegerlas es por falta de recursos, que ya está bien de eslóganes señor Zapatero.

Consuelo Sánchez-Vicente