Actualizado 15/07/2010 14:00

José Cavero.- Piden 20 años de prisión para Carlos Fabra.

MADRID, 15 Jul. (OTR/PRESS) -

La acusación particular, representada por la Unión de Consumidores de España (UCE) pide 20 años de prisión y 18 de inhabilitación para el ejercicio de cargo público para el presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, por presuntos delitos de tráfico de influencias, cohecho, fraude fiscal y blanqueo de dinero. El juez dictó un auto en el que acordó continuar el procedimiento abierto contra Fabra. Fuentes cercanas al caso, que cita el diario gratuito Veinte Minutos, informaron este martes de que la UCE, representada por el abogado José Luis Vera, presentó este lunes ante el juzgado número 1 de Nules el escrito de calificación después de que el juez titular, Jacobo Pin, diese cinco días de plazo a las partes para registrar sus peticiones.

El pasado 1 de julio, el juez dictó un auto en el que acordó continuar el procedimiento abierto contra Fabra, imputado por cohecho, tráfico de influencias y fraude fiscal; su esposa, María de los Desamparados Fernández; el empresario Vicente Vilar; y Monserrat Vives, ex esposa de Vilar. La acusación popular considera que Fabra ha de ser juzgado por cinco delitos fiscales, por los que pide un total de 12 años y medio de prisión, así como una multa del dinero supuestamente defraudado a Hacienda por el presidente de la Diputación (que ascendería a más de 1,7 millones de euros) multiplicado por seis. Pide 13 años de prisión para la esposa de Fabra por cuatro delitos de fraude fiscal y por blanqueo. Con respecto al cohecho activo continuado y cohecho pasivo, la UCE reclama tres años y nueve meses de prisión para el también dirigente del PP de Castellón y la inhabilitación para el ejercicio de cargo público durante 12 años, a los que hay que sumar otros seis años de inhabilitación por un supuesto delito de tráfico de influencias, por el que se pide además un año de cárcel.

En su escrito, la acusación popular reclama asimismo tres años de prisión para Fabra por blanqueo de capitales, un delito que el juez no ha imputado al presidente de la Diputación. Las mismas fuentes explicaron que la UCE solicita 13 años de prisión para la esposa de Fabra por cuatro delitos de fraude fiscal y por blanqueo de dinero, mientras que para el empresario Vicente Vilar y su ex esposa, Montserrat Vives, pide cuatro años de cárcel para cada uno por cohecho y tráfico de influencias.

La denuncia que originó estas diligencias fue presentada en diciembre 2003 por el empresario Vicente Vilar, quien acusó a Fabra de cobrarle por hacer gestiones ante el Ministerio de Sanidad y Agricultura para conseguir agilizar las autorizaciones de fabricación de fitosanitarios. A raíz de esta acusación, Hacienda denunció a Fabra por supuestas irregularidades en la declaración de la renta del año 1999, y, tras ello, el juez acordó que se investigaran sus cuentas hasta 2004. La dirección del PP ha mantenido, contra viento y marea, su apoyo a Fabra, e incluso Mariano Rajoy lo ha elogiado en varias ocasiones por su intachable conducta ciudadana.

El caso de Fabra se añade a los casos del presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps; y del presidente de la Diputación de Alicante, Ripoll, todos encausados por la comisión de presuntos delitos.