¿Para qué sirve Naciones Unidas?. No, no crean que la pregunta es una "boutade". Naciones Unidas, además de ser una gran maquinaria burocrática lleva años demostrando que es poco eficaz.
Naciones Unidas llega tarde y mal ante cualquier situación de catástrofe o de conflicto bélico, y la prueba más reciente es Haití.
Desde el primer momento en que el mundo tuvo noticias de la tragedia en Haití, la solidaridad funcionó. Organizaciones no gubernamentales y gobiernos mandaron aviones cargados de ayuda que no se termina de repartir entre los damnificados. Por si fuera poco, hemos sabido que ha habido algún caso en que las fuerzas de cascos azules de Naciones Unidas no han podido garantizar la seguridad de quienes intentaban sacar a gente de los escombros y por ataques de grupos de haitianos dedicados al pillaje. Como los "cascos azules" tienen ordenes de no disparar, no dispararon a esos delincuentes y se replegaron dejando a su suerte a quienes aún tenían un halito de vida debajo de los escombros.
Todas estas cosas son las que vemos en directo en televisión y las que cuentan los enviados especiales a aquel infierno. Y mire usted por donde han llegado los marines y en las crónicas aseguran que los haitianos han respirado aliviados, seguros de que los marines serán capaces de imponer un cierto orden. Por lo pronto, el aeropuerto ya funciona con normalidad. Pero parece que a la comisaria de Exteriores de la UE no el gusta que los marines anden por Haití, y lo mismo le sucede al ministro francés de Exteriores.
En mi opinión, el presidente Obama ha tenido la capacidad de ponerse a liderar la ayuda a Haití y lo ha hecho de la mejor manera posible en estos momentos, que es enviando a los marines para que restablezcan el orden y garanticen la distribución de la ayuda humanitaria. Si Naciones Unidas lo hubiera hecho, si hubiera sido eficaz, no habría hecho falta la llegada de los marines. Pero ya digo que Naciones Unidas hace los "deberes" tarde y mal.
Es urgente una reforma de Naciones Unidas, y en esa reforma se debería de contemplar poner al frente de la institución a los mejores y no a simples burócratas, como está demostrando ser el actual secretario general.
También se debería de revisar el papel de los "cascos azules", porque una cosa es no participar en un conflicto e interponerse entre las partes y otra que asistan impertérritos a la barbaria, como ha sucedido en tantos y tantos casos.
Ahora la prioridad es ayudar a Haití y eso es lo que Obama ha empezado a hacer como ha creído más eficaz: mandando a los marines. Los demás mucho criticar, pero han sido incapaces de articular de manera eficaz esa ayuda que se ha estado almacenando en el aeropuerto.
En Haití no hay Estado y, o alguien toma la decisión de organizar las cosas como buenamente pueda, o a la tragedia le seguirá el caos, el hambre y la enfermedad. Mientras los marines se dediquen a posibilitar que la ayuda humanitaria llegue a sus destinatarios bien estará su labor. Su presencia allí es la demostración palpable de la ineficacia de Naciones Unidas.
Julia Navarro
Andalucía
