Pide a Tsipras "sensatez y responsabilidad" y confía en que esta "triste historia" acabe con un euro "fortalecido" y más integración
MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado este miércoles su intención de someter a debate y votación en el Pleno del Congreso el nuevo programa de rescate de Grecia que acuerden las instituciones comunitarias dado que "son muchos los recursos que se reclama que garanticen los contribuyentes".
Así lo ha avanzado durante su intervención en la Cámara Baja para dar cuenta del Consejo Europeo de finales de junio, recordando que según los últimos cálculos del FMI las necesidades de financiación de Grecia han "aumentado notablemente" desde que se convocó el referéndum y se decretó el 'corralito', y ya se elevan a entre 82.000 y 86.000 millones de euros, que se sumarán a los más de 200.000 millones de los dos rescates anteriores.
"No puedo compartir que la UE sea insolidaria", ha dicho en este sentido, añadiendo que esos fondos estarán "bien empleados" si Grecia "es capaz de hacer las cosas razonablemente" y señalando que el ejemplo irlandés o portugués demuestran que "si las cosas se hacen con sensatez, seriedad y disposición a arrastrar alguna impopularidad se pueden obtener resultados".
RECUPERAR LA CONFIANZA
Ante una cantidad tan relevante es necesario, por tanto, aplicar unos compromisos exigentes de reformas que permitan a Grecia "restablecer la confianza" de sus socios europeos, y también es imprescindible que el Gobierno heleno muestre "sensatez y responsabilidad" dado que los más "perjudicados" por lo sucedido han sido los griegos.
"Ésta ha sido una triste historia que, al final, puede acabar mejor de lo que hubiéramos podido imaginar hace sólo unas fechas. No ha sido de forma milagrosa, sino por la recuperación de la sensatez y el reconocimiento de la realidad más evidente", considera Rajoy, quien ha llegado a decir que es "mejor un acuerdo que nada" porque así se ha "salvado la situación" aunque siga siendo necesario debatir sobre la gobernanza europea a futuro.
No obstante, ha advertido de que "será difícil volver a los niveles de confianza perdidos" aunque cree que "se puede conseguir". "Más difícil será evitar la frustración de una parte del pueblo griego que, inducido a rechazar unas propuestas hace poco más de una semana, se ve ahora obligado a aceptar otras más exigentes porque la situación es mucho más grave. Será difícil pero se puede superar", ha apostillado.
En cualquier caso, el presidente ha recordado que tras esta "prueba" el euro "saldrá fortalecido" y se alcanzarán "nuevos compromisos políticos" que permitirán a la UE avanzar hasta "nuevas cotas de integración económica, social y política" como ha sucedido tras otras crisis entre los socios europeos. "Cuando una institución cumple las reglas no se va al final, sino al fortalecimiento", ha subrayado.
HOJA DE RUTA CLARA
Rajoy ha recordado los principales hitos en la negociación con el Ejecutivo de Alexis Tsipras, cuya estrategia es "difícil de calificar" ya que ha ido desde el anuncio de que incumpliría el programa de rescate en vigor a principios de año, a una negociación que se vio quebrada por la convocatoria del referéndum pese a tener "posturas muy cercanas" y hasta la petición hace apenas unos días de un tercer rescate que llevará aparejado una "condicionalidad muy estricta".
Unos movimientos que el presidente no entiende pero que "no conducen a ninguna parte" ni "tienen ningún sentido". "Si tuviera que apostar diría que se deben a un desconocimiento de cómo funcionan las instituciones europeas", ha añadido, negando en cualquier caso que la intención del acuerdo sea "humillar o ir contra la dignidad" de nadie. "Nadie está en derrotar a Tsipras. En la UE hay bastante menos ideología de lo que algunos creen", ha apostillado.
Sin embargo, la decisión de Grecia de convocar un referéndum fue "un disparate" que se utilizó para intentar soslayar la responsabilidad del Gobierno y las medidas "impopulares" pero necesarias que debía tomar. "Lo que hay que tener es el coraje, la determinación y la valentía para tomar las decisiones que hay que tomar, ganar el voto en el Parlamento y explicarlo luego a la gente", considera el presidente.
Además, ha recordado que durante todo este tiempo ha sido el Banco Central Europeo (BCE) el que ha evitado la "quiebra" del sistema financiero griego, aunque el 'corralito', la paralización de algunas reformas que ya estaban en marcha y la salida "masiva" de depósitos han hecho que las previsiones de Grecia para este año hayan pasado de un 3% de crecimiento a una recesión de entre el 2% y el 4%.
Pese a ello, "todos los países del euro han mantenido una posición clara" durante los últimos meses de "apoyo a Grecia, pero dentro de la legalidad comunitaria y en un marco compatible con las decisiones de política económica de la unión monetaria", porque es "imprescindible" este tercer rescate, que "ojalá sea el último".
"Ésa ha sido también la posición de España", ha insistido Rajoy en varias ocasiones, recordando que ya se habían aprobado medidas de flexibilización del pago de la deuda griega que es "probable" que vuelvan a ser necesarias en el futuro, aunque "en ningún caso" se hará una quita nominal como la que se aplicó a los acreedores privados.
Y es que sólo ahora, después de haber "perdido mucho tiempo", parece que el equipo de Alexis Tsipras acepta las exigencias, lo que ha permitido que en la cumbre extraordinaria del pasado fin de semana se fijara una "hoja de ruta clara y precisa" que servirá de "guía para salir del laberinto" al que había llegado la negociación.
MEDIDAS CONCRETAS
"No es un acuerdo de intenciones. Es un catálogo de medidas concretas", ha insistido Rajoy, señalando no obstante que aún hace falta que Grecia ponga en marcha las primeras reformas comprometidas para poder negociar el tercer rescate "en un marco de lealtad mutua", recuperando la confianza perdida y sin "dudas sobre la disposición (del Gobierno de Syriza) a cumplir los compromisos asumidos".
"Les adelanto que tengo la mejor predisposición para que este asunto concluya de la mejor manera posible", ha proclamado Rajoy a renglón seguido, lamentando además que las decisiones de Tsipras en los últimos meses hayan provocado un deterioro acelerado de la situación económica en Grecia y han llevado su deuda a una situación "insostenible" que ha elevado "notablemente" las necesidades de financiación del país.
En este sentido, ha apuntado que si Grecia no quiere atenerse a las condiciones de quienes le prestan dinero "entonces que no pida" ayuda, y ha reconocido que le "pesan las razones nacionales" porque son los contribuyentes españoles, que también han sufrido ajustes y recortes, los que deben pagar el rescate.
OTROS ASUNTOS
En otro orden de cosas, Rajoy ha recordado que la reunión del Consejo sirvió para respaldar las recomendaciones del semestre europeo, presentar el informe de los cinco presidentes (Comisión Europea, Consejo Europea, Eurogrupo, BCE y Parlamento Europeo) sobre el diseño de la unión económica y monetaria y hablar de la estrategia europea para el desarrollo digital.
Por su parte, el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha criticado duramente a Grecia por provocar con su "irresponsabilidad" una gran "incertidumbre" en la UE. "Nos parece lamentable", ha dicho, recriminando también a los "populistas" que aplauden a Syriza desde otros países, incluido España, que hayan agravado la situación.
En la misma línea, el portavoz de UPN, Carlos Salvador, ha asegurado que se puede acusar a la UE de muchas cosas, pero no de falta de solidaridad y ha confiado en que el nuevo rescate sirva para mejorar la situación del país heleno, aunque siguen abiertos muchos interrogantes, sobre todos los que están en manos del Gobierno griego.
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