Actualizado 19/08/2009 16:29

La Policía Nacional investiga en Girona sesenta matrimonios sospechosos entre indios y europeas

GIRONA, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Policía Nacional de Girona investiga unos sesenta matrimonios sospechosos, inscritos en el registro civil de la demarcación, por ser, teóricamente ilegales. La mayoría de los hombres registrados son indios y pakistaníes, y habrían pagado hasta 6.000 euros por casarse con una mujer que les proporcionara la residencia comunitaria de forma inmediata.

La policía, según confirmaron fuentes policiales a Europa Press, también busca a personas que harían de intermediarios en estos casos y que se quedarían con parte del dinero por el simple hecho de poner a la pareja en contacto.

La mayoría de estos matrimonios, registrados entre 2008 y principios de 2009, se celebran en parroquias muy pequeñas de comarcas como la Cerdanya o la Garrotxa o en registros civiles de poblaciones de entre 10.000 y 20.000 habitantes dónde la población extranjera no es excesiva, pero tampoco una anomalía, según explicó el jefe de la unidad contra las redes de inmigración y falsificaciones, Antonio Bragado.

Estos matrimonios blancos se detectan cuando el novio tramita la documentación para convertirse en persona comunitaria en la Subdelegación del Gobierno, aunque es muy difícil detectarlos y encontrarlos porqué todos los datos que aportan son falsos.

Según avanzó ayer la Cadena Ser, las novias de alquiler se dividen en dos categorías o grupos. Por un lado estarían las españolas de etnia gitana, la mayoría, afincadas en Valencia e incluso algunas de ellas casadas. Y por otro, chicas portuguesas, alemanas o suecas a las que buscan para conseguir la nacionalidad de esos países.