Baztarrika afirma que la supervivencia del euskera "no corre peligro"

Baztarrika y Martínez de Luna
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 2 agosto 2013 20:35

Se pregunta si "estamos todos a favor del euskera en la misma medida", ya que "el nivel de adhesión" a la lengua "no es el mismo"


BILBAO, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -

El viceconsejero de Política Lingüística del Gobierno vasco, Patxi Baztarrika, ha afirmado que la supervivencia del euskera "no corre peligro" y que "no está agonizando", pero ha destacado que lo que "está en juego" es su "fuerza vital" y que el euskera sea "una lengua viva y fuerte en el día a día".

En una entrevista a Euskadi Irratia, recogida por Europa Press, Baztarrika ha admitido que, a pesar de que euskera y castellano son lenguas oficiales y tienen "el mismo valor legal", en la sociedad vasca "no tienen la misma fuerza, no están equilibradas, porque una es mucha más fuerte que la otra".

En este sentido, ha asegurado que, "si queremos llegar a un equilibrio" entre ambas lenguas, "es imprescindible que, en ese desequilibrio, el euskera tenga más peso y más presencia que el que tiene a día de hoy en nuestra vida cotidiana, es decir, que sea más utilizado".

Aún así, ha reiterado que el futuro del euskera "no corre peligro" y que "no está agonizando". "Pero que no esté agonizando no significa que la fuerza vital del euskera esté garantizada. La cuestión de su fuerza vital es lo que está en juego de aquí a las próximas dos o tres generaciones, no la de su supervivencia", ha destacado.

Asimismo, se ha congratulado de que "la botella del euskera es una botella que se ha ido llenando de líquido los últimos 30 años", ya que, según ha dicho, "hace 25-30 años, los que sabían euskera en esta sociedad eran tan sólo el 20 por ciento, mientras que ahora son el 37 por ciento". Así, tras indicar que el euskera es una lengua que "ha ido creciendo", ha hecho un llamamiento para "no pensar que ya está todo hecho, porque tenemos que estar atentos, ya que dar pasos atrás es muy fácil".

"Aquí no estamos hablando de lenguas, de la relación entre el euskera y el castellano, sino de personas. Las cuestiones y los procesos lingüísticos no se pueden defender sin leyes y normas, pero para que los procesos lingüísticos vayan por un lado u otro, lo decisivo no son los cambios estructurales o legales, sino los cambios en las personas", ha explicado.

En este sentido, ha afirmado que, en estos momentos, nadie pone en duda que la gran mayoría de la sociedad vasca está a favor del euskera, aunque, según ha dicho, "una cosa es estar a favor del euskera pero, ¿estamos todos a favor del euskera en la misma medida?".

"Nos identificamos con el euskera pero, ¿estamos dispuestos a pagar todos el mismo precio para fortalecer el euskera? El nivel de adhesión al euskera no es el mismo, aunque la mayoría esté a favor, y es ahí donde se debe lograr el máximo consenso, en el precio que debemos pagar", ha asegurado.

COSTUMBRES LINGÜÍSTICAS

Patxi Baztarrika ha admitido que es "tremendamente complejo" modificar las costumbres lingüísticas en una sociedad, porque se necesitan "muchos condicionantes", además de la necesidad de que ese cambio en las costumbres se realice "en un clima tranquilo", ya que, "en un clima de confrontación y enfrentamiento, tenemos poco que ganar y mucho que perder con el euskera, porque es una lengua más débil".

En este sentido, el viceconsejero de Política Lingüística del Gobierno vasco ha destacado que uno de los objetivos debe ser que la cuestión del euskera sea "una tarea que implique a toda la sociedad, y eso es algo difícil, que requiere mucho tiempo".

De todas maneras, Baztarrika ha asegurado que en estos momento no se vive en la sociedad vasca ningún clima de confrontación en torno al euskera, "aunque ya hay quienes lo utilizan para la confrontación y aparecen mensajes de confrontación".

"Pero el proceso que se ha dado en la Comunidad Autónoma Vasca en los últimos 25-30 años ha sido ejemplar, porque se ha hecho en un clima de calma, y eso es lo que se debe mantener, porque romperlo es muy fácil", ha concluido.