SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
Unas 300 personas se han concentrado este domingo en la Calle príncipe, a las 17.30 horas, ante la escalinata del Museo MARCO, para apoyar las reclamaciones de una madre en protesta por la "privación de libertad" que sufre su hija, una menor viguesa que se encuentra ingresada en el centro de menores concertado 'Mensajeros de la paz' desde hace seis meses al negarse a vivir con su padre, denunciado hasta en ocho ocasiones por abusos sexuales.
Según ha explicado una portavoz de la familia, la Jueza de 1ª Instancia Nº 5 De Vigo, María del Carmen Salvador Mateos, ha ordenado el ingreso de la niña en un Centro de Menores hace ya seis meses a petición del padre y del fiscal, al entender que la rama materna de la familia representa "una mala influencia" para la pequeña.
"Existen numerosos informes médicos, psiquiátricos, tanto públicos como privados, que avalan estos abusos sexuales, motivo principal porque la niña no quiera ver al padre", explican.
En contraposición, critica que los informes forenses del juzgado Nº5 de Vigo, emitidos por Doña María de la Fuente Pérez y Juan Carlos Rodríguez Fernández, son sistemáticamente "opuestos" a todos los informes emitidos por médicos y pediatras, tanto del Sergas como privados, que reconocen la existencia de lesiones en la niña. La única excepción se dio en un texto en el que los forenses "admiten" lesión grave cuando el padre entrega a la niña con "sangre en la vagina".
Por otro lado, acusan al Fiscal de Menores José Ramón García Palacios de fomentar la relación paterno filial, intercediendo a favor del padre ante la jueza de Familia de Instrucción Nº2 del Pilar Carreira Vidal, para que no se interrumpan las visitas, en lugar de proteger el interés de la menor.
En contraposición, lamentan que "sí han prosperado las denuncias formuladas" contra la madre de la pequeña, de las ha sido "absuelta por el juzgado de lo penal nº1".
Por ello, solicitan que la menor vuelva a casa, ya que "no está en desamparo familiar" y "no cumple las condiciones" para su internamiento" en el centro de menores. Asimismo, critican que el padre "tenga derecho a verla" y que a la madre sólo se le permita "una visita semanal" y con supervisión.
