¿Qué es el NFC y qué usos podemos darle?

Actualizado: lunes, 28 septiembre 2015 8:59
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   MADRID, 28 Sep. (Portaltic) -

   A algunos os sonará a chino si os hablamos de la tecnología de comunicación de corto alcance, aunque es probable que sí hayáis visto alguna vez sus siglas en inglés: NFC (Near Field Communication).

   Pues, para que dejéis de encogeros de hombros cada vez que se hable del NFC, a continuación, os damos las pinceladas básicas para que podáis presumir de conocimiento y, de paso, aprovecharlo en beneficio propio. Pagos móviles, ¡allá vamos!

PRIMERO, LAS PRESENTACIONES

   La tecnología de comunicación de corto alcance permite el intercambio de datos entre dispositivos que están próximos físicamente. Fue Google la compañía que dio a conocer al mundo lo que era el NFC hace ahora cinco años, incorporando por primera vez soporte para esta tecnología en Android 2.3.

   Son muchas las posibilidades que ofrece: compartir fotos, vídeo y música; sincronizar y compartir datos con otros dispositivos inalámbricos; o identificarse en eventos.

   Aunque la gran esperanza, el gran desarrollo del NFC sigue estando en los sistemas de pago móviles. La dependencia de nuestros teléfonos seguirá creciendo y, en solo unos años, podremos vernos pagando el transporte público con el móvil.

   Fabricantes de telefonía, operadoras, entidades financieras, hoteles o establecimientos han aprovechado los beneficios del NFC. Según la firma de análisis Gartner, 2015 terminará con alrededor de 700 millones de teléfonos con tecnología NFC integrada. En España, aproximadamente 600.000 tiendas ya cuentan con terminales de punto de venta (TPV) adaptados al NFC.

NO ES POSIBLE EL AMOR A DISTANCIA

   Si eres de los que conserva una y otra vez la esperanza de que la distancia no erosiona la relación, en este caso, estás perdido. Aquí la distancia es vital. Para que la tecnología funcione, los dos dispositivos que intercambien datos e información deben estar a centímetros de distancia. Por supuesto, ambos deben estar equipados con un chip NFC -la relación es cosa de dos-. La forma de comunicarse puede ser de dos tipos: unidireccional o bidireccional.

   -Unidireccional: es solo un dispositivo el que se encarga de leer la información que le da el otro. El caso, por ejemplo, de un teléfono móvil, un lector de tarjetas de crédito o un lector de tarjetas de autobús. De este modo si rozamos nuestra tarjeta de autobús a un terminal con NFC, se resta el saldo registrado.

   -Bidireccional: los dos dispositivos son activos. Los dos se pueden leer y escribir entre sí. Al entrar en contacto, pueden compartir, por ejemplo, listas de contactos, enlaces y fotos. Lo sé, lo sé... el Bluetooth... Ya, pero ¿y el consumo de energía?

NOS HA SALIDO AHORRADOR Y SEGURO

   Si lo comparamos con el Bluetooth, el NFC emplea mucha menos energía. Si realmente creemos que, algún día -para muchos, no muy lejano-, los teléfonos pueden acabar con las carteras, el ahorro de energía y la vida de la batería será vital. ¡Si ya lo es ahora!

   La privacidad de nuestros datos o información, ante todo. Sobre todo, si se trata de pagar. Si los teléfonos móviles van a ser las tarjetas de débito del futuro es importantísima la seguridad. La tecnología NFC lo es. Su estructura es tan compleja que cualquier intento de hackearla o interceptarla resulta muy complicado.

ETIQUETAS NFC

   Es una de las formas más fáciles de usar el NFC y de hacer que tu teléfono realice una determinada acción. Puedes poner una etiqueta NFC en el escritorio de la oficina, por ejemplo, y al tocarla con el móvil puedes habilitar la WiFi o reducir el brillo de la pantalla.

   También puedes dejar una etiqueta en tu mesita de noche para que, al colocar tu teléfono junto a ella, se ponga en silencio, se desactiven los datos móviles y se active el modo ahorro de energía. Todo, sin que tengas que mover un dedo.

EXPERIENCIAS YA EN MARCHA

   Contábamos hace unas líneas que Google fue uno de los pioneros en utilizar el NFC. En 2011 lanzó su propio sistema de pagos a través del móvil: Wallet. Apple no se quiso quedar atrás y tres años después lanzó Apple Pay. Recientemente, Samsung hizo lo propio para ofrecer Samsung Pay.

   Aquí en España, La Caixa o BBVA han lanzado sus propias plataformas de pagos móviles. Ofrecen tarjetas de crédito con chip NFC que permite realizar estos pagos 'contactless'.

   Los expertos coinciden en que, de momento, el éxito de esta tecnología es escaso, tiene muchas posibilidades y mucho recorrido