Los peces pulmonados aportan información evolutiva clave

Pez Pulmonado
TANNIN/WIKIMEDIA COMMONS
Actualizado: miércoles, 5 octubre 2011 12:19

MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un estudio sobre el desarrollo muscular de diferentes tipos de peces ha aportado varias ideas sobre el salto genético que sentó las bases para la evolución de las patas traseras de los animales terrestres. Esta innovación dio lugar a los tetrápodos -criaturas de cuatro patas- y a los lejanos antepasados del hombre, que dieron los primeros pasos sobre tierra firme hace unos 400 millones de años.

El equipo de científicos australianos que llevó a cabo esta investigación, dirigido por el profesor Peter Currie del Instituto Australiano de Medicina Regenerativa de la Universidad de Monash, y el doctor Nicolás Cole de la Universidad de Sydney, ha publicado sus resultados en 'PLoS Biology'.

Los científicos han sabido durante mucho tiempo que los peces pulmonados son los ancestros de los tetrápodos; estos peces pueden sobrevivir en la tierra, respirar aire y usar sus aletas pélvicas para propulsarse. Australia es el hogar de tres de las especies de los pocos peces pulmonados que existen -- dos especies marinas y una que habita en la cuenca del río Queensland Mary.

Anteriormente, los estudios extraían sus conclusiones de esqueletos fósiles, sin embargo, los músculos indispensables para la locomoción no se conservan en el registro fósil. Este nuevo estudio analizó peces que viven hoy en día para así poder seguir la evolución de los músculos de la aleta pélvica, con el objetivo de observar cómo evolucionaron los miembros de los tetrápodos. Los investigadores estudiaron peces cartilaginosos -el tiburón bambú y el tiburón elefante- y otras tres especies de peces óseos -el pulmonado australiano, el pez cebra y el pez espátula americano. Los peces óseos y, en particular, los peces pulmonados, son los ancestros vivos más cercanos de los tetrápodos.

"Hemos observado que la forma en que diferentes especies de peces generan los músculos de las aletas pélvicas es la precursora de la evolución de las extremidades traseras," explica el profesor Currie, biólogo del desarrollo. Currie y su equipo manipularon genéticamente a los peces para rastrear la migración de las células precursoras del músculo en las primeras etapas del desarrollo, mientras el cuerpo del animal iba tomando forma.

Los investigadores observaron entonces que los peces óseos poseen un mecanismo de formación de los músculos pélvicos de la aleta diferente al de los peces cartilaginosos, mecanismo que representa una piedra angular en la evolución fisiológica de los tetrápodos.

"Los seres humanos son peces modificados", afirma el profesor Currie, "el genoma de los peces no es muy diferente del nuestro. Hemos demostrado que el mecanismo de formación de los músculos pélvicos en los peces óseos representa una transición entre los tiburones y nuestros antepasados ??tetrápodos".