CADIZ 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
El preso de Puerto II -J.M.P.M.-- que mantenía una huelga de hambre desde el pasado día 24 de enero para defender su inocencia en un caso relacionado con un atraco en Barbate (Cádiz) y por el que ha sido condenado a cuatro años de cárcel por el juzgado de la Penal número dos de Cádiz, abandonó ayer la huelga ante el compromiso de la dirección de ayudarle en su caso.
Según explicó a Europa Press el padre del recluso, su hijo abandonó ayer la huelga de hambre que mantenía desde el pasado día 24 de enero tras mantener una reunión con la dirección del centro penitenciario y obtener el compromiso de que elaborarán un informe que remitirán al juzgado para que vuelvan a mirar su caso.
Al parecer, el estado de salud del recluso es bueno, pese a los 19 días de huelga, según las exploraciones realizadas por la dirección médica del centro.
Según indicó el padre, su hijo mantuvo una reunión con la dirección del centro y ha obtenido este compromiso "porque lo que ha hecho de la huelga no es ninguna pantomima y algo habrán visto". En principio, la dirección realizará el informe esta semana y dará una copia al propio recluso, que ya ha indicado que si el jueves no obtiene la copia de ese informe, volverá a la huelga de hambre, aunque esta vez sin ingerir ni siquiera agua.
LOS HECHOS DE LA CONDENA
J.M.P.M fue condenado a cuatro años de cárcel por un atraco cometido en una tienda de tejidos de Barbate, aunque el padre asegura que "es inocente", argumentando que un retrato robot hecho por la afectada "no coincide con ningún rasgo de mi hijo".
No obstante, el padre advirtió que su hijo "no es ningún santo", ya que tiene antecedentes por algo realizado en Castellón, aunque indicó que "en este caso concreto es inocente" y aseguró que "lo que quería era integrarse en la sociedad" y para ello pronto se iba a ir con un hermano a trabajar a Málaga.
Para esto, según relató el padre, comenzó a salir con una señora de Barbate, "la cual dejó cuando se dio cuenta de a lo que se dedicaba (tráfico de estupefacientes), recibiendo amenazas por ello, habiendo pruebas de esto en mensajes al móvil". Según indicó el padre, "esta señora junto a un primo suyo parece ser que cometieron el atraco, y que ella lo denuncia él (a su hijo, ahora preso y en huelga de hambre)".
Según indicó, la Guardia Civil fue a buscarlo a su domicilio, sin que pusiera resistencia. Posteriormente, pasó dos ruedas de reconocimiento, "poniendo en la segunda a dos o tres policías locales y gente de la calle, además de que la Guardia civil quería que estuviera esposado en esa rueda".
El padre indicó en declaraciones a Europa Press que su hijo "está muy afectado porque se considera inocente" y achacó a sus antecedentes penales el que fuera condenado, "porque la propia afectada tenía grandes dudas en la rueda de reconocimiento".
Finalmente, manifestó que lo que pide es que se le conceda la duda, "que en este caso es más que razonable", así como que se le dé la libertad provisional y se investigue "con las pruebas que tienen a las personas que pueden haber cometido el atraco", ya que señaló que "hay un retrato robot hecho por la afectada que no concuerda para nada con los rasgos de mi hijo y, aunque no estoy acusando a nadie, coinciden con el primo de esta mujer a la que él (su hijo) dejó".